El pueblo de Tenerife y Canarias se dispone a celebrar, una vez más, este 31 de mayo de 2009, el aniversario de la gran victoria de Asentehunt contra las tropas invasoras españolas, y digo españolas porque después del matrimonio de Isabel de Castilla y Fernando de Aragón las conquistas y crímenes contra la Humanidad se hacían en nombre de las monarquías españolas: expulsión de los judíos sefarditas, conquistas en África y América, expulsión de los moriscos españoles en 1609 y masacres de los pueblos amerindios, así como el nefasto tráfico de esclavos. Para cubrir todos estos crímenes, un Papa español de Valencia, de la familia de los Borgia, Alejandro VI, otorgó gratuitamente a los nuevos reyes de España el título de Católicos, con lo que desde hace siglos se sigue aún engañando a la opinión española por los historiadores de la monarquía de este Estado europeo.
Hace ahora 515 años que desembarcó en las costas de Añazu, hoy capital de Tenerife, un aventurero y traficante de esclavos, asesino de guanches, que estuvo como capitán en la conquista en la isla de Tamarán a las órdenes de Pedro de Vera, otro aventurero español de triste memoria en la historia de Canarias que quería conquistar Tenerife por ser la isla más poblada, donde podía ganar muchos esclavos para venderlos en los mercados españoles y, al mismo tiempo, transformar esta isla en un lugar de tránsito y aguada para las flotas españolas que se dirigían al continente americano, llenas de aventureros y presidiarios sacados de los penales españoles, para conquistar aquellas nuevas tierras donde se decía que había mucho oro y plata e indios salvajes a los que se les podía engañar vendiéndoles espejitos y otras chucherías.
El aventurero español Alonso Fernández de Lugo, con sus huestes de mercenarios, desembarca en Tenerife un 3 de mayo de 1494, no sin antes comprar y engañar a los bandos de paces del sur de la isla con tratados y promesas que después jamás cumplió. Se avanzó con sus huestes a través de los campos tinerfeños para vencer la resistencia de los guanches del norte, que obedecían a un caudillo llamado Quebehi Imoha Bekhomo, Menkey del valle Taoro, que había reunido cuatro otros menceyatos y se había negado a someterse a los reyes de España como habían hecho los otros cuatro de la isla. El aventurero europeo confiaba en sus caballos, sus ballestas, sus bombardas y sus armaduras de acero e iba pensando que estos guanches no iban a resistir a su experiencia de combate que había ganado en la toma de Granada o en los combates en la isla de Tamarán, donde, con su astucia, había engañado y después comprado al Guanarteme de la isla, al que había logrado bautizar, después de llevarlo a España y engatusarlo, vistiéndole de señorito español, con el nombre cristiano de Fernando Guanarteme, una vez convertido en traidor. Pero no contaba con que el Gran Menkey, aunque no tenía el armamento de las tropas españolas, tenía la fuerza que da luchar por la libertad de su patria y el honor y la dignidad que debe tener todo caudillo que sabe que nunca se debe ceder al enemigo que viene a conquistarnos. Y allí, en el barranco de Asentejunt, sufrió el ejército español invasor su primera derrota total fuera de España ante un enemigo que les combatía sólo con piedras y garrotes, pero con un coraje que muestran los pueblos cuando saben que luchan por sus justos derechos y su libertad.
Años después prosiguió la conquista y España tuvo que enviar, contra el Padre de la Patria guanche, a miles de nuevos soldados con armamento moderno, arcabuces, bombardas y toda una caballería pesada, y la colaboración del traidor Fernando Guanarteme, no sin antes y durante dos años haber envenenado las fuentes y los eres y pozos de los guanches y haber esparcido cadáveres de soldados españoles muertos de peste y otras epidemias, para poder vencer al gran menkey de Taoro, que murió combatiendo heroicamente en la batalla de Aguere en 1496, pero cuyo recuerdo permanece en la historia de nuestro pueblo y todos los patriotas le consideramos como el Padre de la Patria.
Pero ahora, este año, lo que celebramos en Asentehunt, hoy llamado Asentejo, es una gran victoria que durante siglos no se celebraba, hasta que, a través de las ondas de La Voz de Canarias Libre, desde Argel, el MPAIAC empezó a reivindicarla, poniendo en los postes de la luz y algunos tendidos eléctricos o en el propio barranco las primeras banderas tricolor de las Siete Estrellas Verdes, símbolos de lucha, dignidad, coraje e independencia, anunciadoras de la futura República Federal Canaria. Y fue al año siguiente, en mayo de 1977, después que el 1º de noviembre de 1976, cansado el MPAIAC de exigirle al Gobierno español, por activa y por pasiva, y a través de la prensa internacional y organismos como la OUA, que descolonizara el archipiélago canario, que nos vimos obligados a pasar a la etapa de propaganda armada, para que la opinión internacional y los gobiernos africanos llegaran a la convicción de que la metrópoli española no estaba dispuesta a descolonizar pacífica y democráticamente, que es lo que desea nuestro pueblo pacífico, conquistado por la fuerza hace seis siglos por el reino de España.
Sirva la celebración de este nuevo aniversario para que España comprenda que nuestro pueblo está dispuesto a arrancar nuestra soberanía y nuestros justos y legítimos derechos nacionales antes de finales de 2010, no por que la digamos nosotros, sino porque así lo exigen las Naciones Unidas, así que déjense de jugar a elecciones europeas y otras monsergas en estos días, ya que Canarias no es Europa por muchos Guanartemes (López de Aguilar), Guanartemas (Claudina Morales) o Godos (Gabriel Matos) que ensucien con sus carteles nuestro paisaje, que, con este 515 aniversario de Asentehunt, los canarios estamos preparando ya nuestra próxima y última victoria contra el colonialismo español y europeo.
Antonio Cubillo Ferreira
Presidente del Congreso Nacional de Canarias, brazo político del Movimiento de Liberación Nacional, el MPAIAC
domingo, 31 de mayo de 2009
jueves, 28 de mayo de 2009
Por cada voto a Iniciativa Internacionalista, un bofetón a Rubalcaba y al rey Juan Carlos
La táctica política-jurídica que ha llevado a cabo Iniciativa Internacionalista ha sido correcta en la medida que ha ganado la primera partida al Estado burgués. En el haber debemos apuntarnos dos elementos tácticos exquisitos:
- Insertar una contradicción en el seno de los poderes del Estado, dejando a Rubalcaba con la brocha “de la criminalización y la ilegalización” en la mano.
- La profusión mediática multiplicativa del mensaje de solidaridad e internacionalismo así como la denuncia del carácter antidemocrático del Estado español.
El voto en unas elecciones burguesas no es un instrumento estratégico revolucionario, pero sí, éste voto a II, supone la mejor acción directa revolucionaria que podemos hacer durante las 24 horas del día 7 de junio. Al día siguiente y sucesivos, Iniciativa Internacionalista tendrá que demostrar la capacidad de desarrollar política y organizativamente un proyecto de confluencia de las izquierdas rupturistas con el régimen monárquico español, sean independentistas, soberanistas o reivindicadores de una III República que respete la autodeterminación de los pueblos (como son Corriente Roja e Iniciativa Comunista).
El voto a II no es un voto que vaya a movilizar a la clase obrera (con la salvedad de EH como ha demostrado su reciente Huelga General), pero sí un voto “antirepresivo” de sectores populares conscientes, algunos de los cuales actualmente militan y otros "muchos más", decenas de miles, que han militado en el pasado, y que actualmente permanecen en sus casas, pero sin embargo, a pesar de su desilusión política, no han perdido su olfato revolucionario. En este tipo de circunstancias, como diría un tertuliano, su “tozudez antisistema” le puede ante una oportunidad de este calado. A la sazón, llegar a este sector social sólo ha sido posible gracias a la torpeza del Gobierno del PSOE al inyectar popularidad a nuestra candidatura. Lenin explicó muy bien, en su folleto sobre el izquierdismo, como los bolcheviques se aprovecharon de las campañas represivas y de las elecciones burguesas (a veces boicot, otras veces "pollo" dentro del parlamento") en la línea de los intereses materialistas revolucionarios.
El voto a II no es voto comunista pero muchos comunistas van a votar a II. Porque votar a II es votar contra la mentira de IU tanto por ser colchón del régimen contra la izquierda revolucionaria como por ser la caja B de votos del PSOE. Es un voto, contra la connivencia entre Willy Meyer y el Ministerio del Interior, tal y como ha demostrado Sánchez Gordillo al denunciar que se intentó expulsar a los cargos de la CUT que avalaron a II y no a otros cargos de IU que avalaron IA por ejemplo. En sus palabras, IU tuvo "la pretensión de que la retirada de avales hiciera naufragar la posibilidad de que esta candidatura pudiera presentarse a las elecciones asumiendo las falsas sospechas del Ministerio del Interior y convirtiendo así a la organización en cómplice activo de la aplicación de una Ley de Partidos absolutamente contraria a las más elementales libertades. Ley, además, que IU no comparte y rechaza"
Como se puede explicar que IU-PCE con una mano rompa el papelito del pacto constitucional y con la otra mano reconozca al Estado de derecho que denuncian, para que finalmente acabe respetando (otra manera de ser "colaborador necesario") las decisiones del alto tribunal constitucional aunque no les guste. Eso es así, y racionalmente no puede ser de otra manera, porque comparten "en la práctica" (único principio materialista de la veracidad) los principios constitucionales, y por tanto, siguen formando parte del régimen constitucional, con su función específica.
Que sepa Willy Meyer y sus amigos de la porra “antibolonia” (ICV), que muchos de sus votantes van hacer un voto útil contra el sistema, es decir, un voto a II. Habrá que recordarle a muchos electores y militantes de IU que hayan tenido de referente a la "IU de Anguita" (por cierto; muy digna su solidaridad con II), que Rubalcaba fue uno de los fontaneros encargados de destruir la autonomía de IU respecto al PSOE, para abrir paso a una corriente interna mayoritaria favorable al pacto servil con el PSOE. Entre sus méritos está la teorización de "La Pinza" y envío de submarinos psocialistas a IU con billete de ida y vuelta. Los 'anguitistas' pueden también vengarse contra Rubalcaba y su monaguillo Llamazares, con su voto a II. Por otro lado, también se arañarán involuntariamente votos a Izquierda Anticapitalista y PCPE, cuyos partidos y militantes, según mi punto de vista personal, tendrán que preguntase porqué no le suponen un problema al sistema.
El voto a II no es un voto nacionalista, pero sí un voto internacionalista. Como ha recordado el comunista vasco-madrileño Alfonso Sastre, número 1 de la lista, la interpretación revolucionaria y marxista del internacionalismo hay que buscarla en Lenin cuando recordó a "Rosa Luxemburgo que ella era polaca y que debería partir de esa base, o sea, de una convicción inter-nacionalista, y no de un cosmopolitismo proletario abstracto y, menos, místico". Es decir, el internacionalismo es la unidad de las luchas concretas desde el reconocimiento a todos los pueblos. En el contexto del Estado español, donde para unos ciudadanos nunca se consolidó la nación española, aunque la defiendan, y donde para otros, que la rechazan por reaccionaria, deducen que: o bien se le pasó el tren de la Historia, negando su existencia, o bien que el tren "franquista" le dió su puntilla en la decadencia como nación burguesa, para todas ellas, en definitiva, es necesario que una izquierda consecuente reconozca las diferentes realidades nacionales y a partir de ahí buscar un punto común en la estrategia revolucionaria unitaria contra el régimen burgués español. Iniciativa Internacionalista, en ese sentido, es un paso.
El voto de II no será un voto de la progresía radical, pero sí un voto antisocialdemócrata y antifascista. Será un voto homenaje a todos los represaliados de este régimen y en particular un homenaje a toda una vida revolucionaria como la de Alfonso Sastre; un comunista que ha conseguido ser coherente; todo un ejemplo en las filas de la cultura,... tan propensas a beber de la subvención clientelar del PSOE. Sastre ha mantenido una unidad dialéctica lo que piensa, dice, hace y siente, contribuyendo con su extensa obra a la formación de una nueva hegemonía popular, además de la permanente promoción de la ideología revolucionaria a través de la editorial Hiru.
El voto a II no es un voto más al saco del mercado electoral, pero sí un voto ideológico que se sitúa enfrente del sistema y no en las comodidades de las orillas del sistema donde se mantienen vasos comunicantes con el mismo. El voto no será el inicio de ninguna revolución ni podrá, lamentablemente, expresar todo el repudio social a la crisis (la izquierda estamos a años luz de nuestra clase entre otras cosas por el "desarme" de la izquierda en la Transición, exceptuando la izquierda abertzale), pero sí que supondrá una patada al régimen en el culo de Rubalcaba y el rey Juan Carlos, que mecerá la pena, sólo por eso, haberse levantado ese día. Con o sin resaca, será el voto de la alegría revolucionaria frente a la mentira monárquica. Levantémonos el 7-J con pierna izquierda y voto a Iniciativa Internacionalista.
Nikolai Nechaev. Militante de Iniciativa Comunista y colaborador de la revista "Internacionalistas en Red".
Comunicado de Isûkân: Apoyamos y votaremos a Iniciativa Internacionalista
UP pide el voto para Iniciativa Internacionalista
POR UNA CANARIAS LIBRE Y SOCIALISTA, EL VOTO ÚTIL PARA INICIATIVA INTERNACIONALISTA
Entrevista a Antonio Sardá
Algo que agradecer a la Iniciativa Internacionalista. Fotografía de la democracia española
Juntos somos un volcán
- Insertar una contradicción en el seno de los poderes del Estado, dejando a Rubalcaba con la brocha “de la criminalización y la ilegalización” en la mano.
- La profusión mediática multiplicativa del mensaje de solidaridad e internacionalismo así como la denuncia del carácter antidemocrático del Estado español.
El voto en unas elecciones burguesas no es un instrumento estratégico revolucionario, pero sí, éste voto a II, supone la mejor acción directa revolucionaria que podemos hacer durante las 24 horas del día 7 de junio. Al día siguiente y sucesivos, Iniciativa Internacionalista tendrá que demostrar la capacidad de desarrollar política y organizativamente un proyecto de confluencia de las izquierdas rupturistas con el régimen monárquico español, sean independentistas, soberanistas o reivindicadores de una III República que respete la autodeterminación de los pueblos (como son Corriente Roja e Iniciativa Comunista).
El voto a II no es un voto que vaya a movilizar a la clase obrera (con la salvedad de EH como ha demostrado su reciente Huelga General), pero sí un voto “antirepresivo” de sectores populares conscientes, algunos de los cuales actualmente militan y otros "muchos más", decenas de miles, que han militado en el pasado, y que actualmente permanecen en sus casas, pero sin embargo, a pesar de su desilusión política, no han perdido su olfato revolucionario. En este tipo de circunstancias, como diría un tertuliano, su “tozudez antisistema” le puede ante una oportunidad de este calado. A la sazón, llegar a este sector social sólo ha sido posible gracias a la torpeza del Gobierno del PSOE al inyectar popularidad a nuestra candidatura. Lenin explicó muy bien, en su folleto sobre el izquierdismo, como los bolcheviques se aprovecharon de las campañas represivas y de las elecciones burguesas (a veces boicot, otras veces "pollo" dentro del parlamento") en la línea de los intereses materialistas revolucionarios.
El voto a II no es voto comunista pero muchos comunistas van a votar a II. Porque votar a II es votar contra la mentira de IU tanto por ser colchón del régimen contra la izquierda revolucionaria como por ser la caja B de votos del PSOE. Es un voto, contra la connivencia entre Willy Meyer y el Ministerio del Interior, tal y como ha demostrado Sánchez Gordillo al denunciar que se intentó expulsar a los cargos de la CUT que avalaron a II y no a otros cargos de IU que avalaron IA por ejemplo. En sus palabras, IU tuvo "la pretensión de que la retirada de avales hiciera naufragar la posibilidad de que esta candidatura pudiera presentarse a las elecciones asumiendo las falsas sospechas del Ministerio del Interior y convirtiendo así a la organización en cómplice activo de la aplicación de una Ley de Partidos absolutamente contraria a las más elementales libertades. Ley, además, que IU no comparte y rechaza"
Como se puede explicar que IU-PCE con una mano rompa el papelito del pacto constitucional y con la otra mano reconozca al Estado de derecho que denuncian, para que finalmente acabe respetando (otra manera de ser "colaborador necesario") las decisiones del alto tribunal constitucional aunque no les guste. Eso es así, y racionalmente no puede ser de otra manera, porque comparten "en la práctica" (único principio materialista de la veracidad) los principios constitucionales, y por tanto, siguen formando parte del régimen constitucional, con su función específica.
Que sepa Willy Meyer y sus amigos de la porra “antibolonia” (ICV), que muchos de sus votantes van hacer un voto útil contra el sistema, es decir, un voto a II. Habrá que recordarle a muchos electores y militantes de IU que hayan tenido de referente a la "IU de Anguita" (por cierto; muy digna su solidaridad con II), que Rubalcaba fue uno de los fontaneros encargados de destruir la autonomía de IU respecto al PSOE, para abrir paso a una corriente interna mayoritaria favorable al pacto servil con el PSOE. Entre sus méritos está la teorización de "La Pinza" y envío de submarinos psocialistas a IU con billete de ida y vuelta. Los 'anguitistas' pueden también vengarse contra Rubalcaba y su monaguillo Llamazares, con su voto a II. Por otro lado, también se arañarán involuntariamente votos a Izquierda Anticapitalista y PCPE, cuyos partidos y militantes, según mi punto de vista personal, tendrán que preguntase porqué no le suponen un problema al sistema.
El voto a II no es un voto nacionalista, pero sí un voto internacionalista. Como ha recordado el comunista vasco-madrileño Alfonso Sastre, número 1 de la lista, la interpretación revolucionaria y marxista del internacionalismo hay que buscarla en Lenin cuando recordó a "Rosa Luxemburgo que ella era polaca y que debería partir de esa base, o sea, de una convicción inter-nacionalista, y no de un cosmopolitismo proletario abstracto y, menos, místico". Es decir, el internacionalismo es la unidad de las luchas concretas desde el reconocimiento a todos los pueblos. En el contexto del Estado español, donde para unos ciudadanos nunca se consolidó la nación española, aunque la defiendan, y donde para otros, que la rechazan por reaccionaria, deducen que: o bien se le pasó el tren de la Historia, negando su existencia, o bien que el tren "franquista" le dió su puntilla en la decadencia como nación burguesa, para todas ellas, en definitiva, es necesario que una izquierda consecuente reconozca las diferentes realidades nacionales y a partir de ahí buscar un punto común en la estrategia revolucionaria unitaria contra el régimen burgués español. Iniciativa Internacionalista, en ese sentido, es un paso.
El voto de II no será un voto de la progresía radical, pero sí un voto antisocialdemócrata y antifascista. Será un voto homenaje a todos los represaliados de este régimen y en particular un homenaje a toda una vida revolucionaria como la de Alfonso Sastre; un comunista que ha conseguido ser coherente; todo un ejemplo en las filas de la cultura,... tan propensas a beber de la subvención clientelar del PSOE. Sastre ha mantenido una unidad dialéctica lo que piensa, dice, hace y siente, contribuyendo con su extensa obra a la formación de una nueva hegemonía popular, además de la permanente promoción de la ideología revolucionaria a través de la editorial Hiru.
El voto a II no es un voto más al saco del mercado electoral, pero sí un voto ideológico que se sitúa enfrente del sistema y no en las comodidades de las orillas del sistema donde se mantienen vasos comunicantes con el mismo. El voto no será el inicio de ninguna revolución ni podrá, lamentablemente, expresar todo el repudio social a la crisis (la izquierda estamos a años luz de nuestra clase entre otras cosas por el "desarme" de la izquierda en la Transición, exceptuando la izquierda abertzale), pero sí que supondrá una patada al régimen en el culo de Rubalcaba y el rey Juan Carlos, que mecerá la pena, sólo por eso, haberse levantado ese día. Con o sin resaca, será el voto de la alegría revolucionaria frente a la mentira monárquica. Levantémonos el 7-J con pierna izquierda y voto a Iniciativa Internacionalista.
Nikolai Nechaev. Militante de Iniciativa Comunista y colaborador de la revista "Internacionalistas en Red".
Comunicado de Isûkân: Apoyamos y votaremos a Iniciativa Internacionalista
UP pide el voto para Iniciativa Internacionalista
POR UNA CANARIAS LIBRE Y SOCIALISTA, EL VOTO ÚTIL PARA INICIATIVA INTERNACIONALISTA
Entrevista a Antonio Sardá
Algo que agradecer a la Iniciativa Internacionalista. Fotografía de la democracia española
Juntos somos un volcán
La larga marcha desde Franco a Sastre
Primero fue la sublevación fascista, siguió la Guerra de España con su corte de asesinatos, prisiones y represiones, luego fue el exilio y el nacionalcatolicismo, los veleros clandestinos hacia Venezuela, el hambre, el miedo y el silencio…. hasta que empezó la larga marcha.
Cuando en 1959, y a raíz de que la “justicia” española asesinara en Las Palmas, a garrote vil, al alzado Juan García Suárez, “El Corredera”, se funda en Gran Canaria el grupo “Canarias Libre” que aglutina a comunistas, a los anticlericales de la llamada “Iglesia Cubana”, a militantes independentistas y a sectores obreros, fundamentalmente la “carga blanca” de los muelles grancanarios. El grupo propuso construir el “Partido Comunista Canario”, pero, a pesar de la teórica reivindicación de Autodeterminación que mantenía el PCE -encabezado por Carrillo- nunca optó por la descolonización real de Canarias y se opuso al proyecto. El centralismo burocrático se impuso a la libre determinación.
Cuando en 1962 y, en Canarias, la policía española desarticula y encarcela a los integrantes de “Canarias Libre”, en España se enviaba a la cárcel a Eva Forest -con su hija recién nacida Eva Sastre- por firmar un artículo apoyando la huelga minera asturiana. La izquierda española dijo que aquello era el fascismo, el mismo que por esos días asesinaba “legalmente” a Julián Grimau. Ese año se casaba Juan Carlos Borbón, educado por Franco desde 1948 para ser su sucesor. Eso, para la izquierda española, también era cosa del franquismo que se acabaría con la III República.
Cuando en 1964 se funda en Argel el MPAIAC y Sekou Touré pide en la Cumbre de los Países No Alineados, la independencia de Canarias recibe el rechazo unánime de la “izquierda” española que teóricamente propugnaba el supuesto apoyo a la Autodeterminación. Antonio Cubillo añade las 7 estrellas verdes a la bandera que en 1961 creara para Canarias Libre D.ª Mª del Carmen Sarmiento y sus hijos Jesús y Arturo Cantero, diseñando así la actual bandera nacional canaria. Solo fue aceptada por los militantes independentistas y anatematizada por el resto.
Cuando en 1966 a Alfonso Sastre se le prohíbe publicar “La Sangre y la Ceniza” (que ya en 1965 recuerdo que se leían capítulos en las Asambleas estudiantiles de la Complutense) seguía, para la “izquierda” española, siendo el fascismo franquista el que, por participar en las madrileñas “Jornadas contra la Represión”, lo lleva de inquilino forzoso a Carabanchel. En pago, Sastre, nos regaló a todos una Balada.
Cuando en 1968 la Organización para la Unidad Africana, OUA, en julio, reconoce el derecho a la independencia de Canarias como islas africanas, todos los partidos españoles, incluidos los que trabajaban en el exilio, rechazan “la ingerencia” de la OUA en los asuntos “españoles”. Eso si, mantenían la Autodeterminación en sus programas. En la grancanaria Sardina del Norte la Guardia Civil española detiene a unos 50 de los más de 400 obreros concentrados en asamblea mientras más de 1.500 obreros portuarios mantenían por 3 días la primera gran huelga antifranquista en el estado Entre ellos a Tony Gallardo. Todavía el PCE y la izquierda creían en la lucha por la libertad.
Cuando en 1969, el dictador, cuya policía acababa de asesinar en Madrid al estudiante Enrique Ruano, declara durante un trimestre el Estado de Excepción, nombra sucesor a Juan Carlos Borbón a “título de Rey” y el susodicho jura sobre la Biblia y ante las Cortes fascistas “cumplir y hacer cumplir las Leyes Fundamentales” del Régimen. El propio dictador en su discurso nos aclara que: “Estimo llegado el momento de proponer a las Cortes Españolas como persona llamada en su día a sucederme, a título de Rey, al Príncipe Don Juan Carlos de Borbón y Borbón, quien, tras haber recibido la adecuada formación para su alta misión y formar parte de los tres Ejércitos, ha dado pruebas fehacientes de su acendrado patriotismo y de su total identificación con los Principios del Movimiento y Leyes Fundamentales del Reino”. Mientras, la izquierda española esperaba por la República que acabaría con el fascismo. Estaba “Esperando a un Godot” que, como el de Beckett, nunca llegó. Mientras, la represión franquista arrecia en Euzkadi, punta de lanza de la lucha antifranquista, donde suma ese año más de 2.000 detenciones, 300 exiliados forzosos y cientos de años de prisión impuestos por el tristemente célebre Tribunal de Orden Público.
Cuando en 1970 la “Justicia” franquista abre el “Proceso de Burgos” contra 16 militantes de ETA (entre ellos algunos dirigentes actuales del PSE-PSOE), acusados de la muerte en 1968 del sanguinario jefe de la Brigada Político Social en Donosti, Melitón Manzanas, y dicta 9 penas de muerte y más de medio milenio de años de prisión, la izquierda española protesta, pero son más de 300 los intelectuales catalanes que mantuvieron un encierro en Montserrat y es el matrimonio Sastre/Forest quién crea el “Comité de Solidaridad con Euzkadi”, país en el que se cebaba cruentamente la represión franquista. La movilización popular fue masiva hasta la consecución de la conmutación de las penas capitales.
Cuando en 1972 y, para más inri, el 18 de julio, Franco firma un decreto disponiendo que Carrero Blanco ocupe, caso de vacante, la Jefatura del Estado, diseña y hace reposar, en la persona del almirante, la continuidad de la ortodoxia franquista.
Cuando en 1973, Franco, que desde 1967 había separado por Ley Orgánica la Jefatura del Estado -que se reserva in aeternam- de la Presidencia del Consejo de Ministros (Presidencia del Gobierno), nombra a Carrero Blanco como Presidente y da la entrada a los ministerios a los “tecnócratas” del Opus Dei –los “López”-, ahonda en su diseño continuista. El nuevo gobierno dura hasta que, finalizando el año, ETA hace subir volando a los altares, pero pasando por los tejados jesuíticos, al Almirante Carrero Blanco –el elefante blanco del Régimen- y deja al franquismo sin el posible sucesor en el caudillaje. No hay lágrimas del pueblo que se derramen por él y si muchas felicitaciones contenidas. Los partidos, legales e ilegales, como PSOE y PCE condenan el atentado, aunque reconocen, sotovocce, que el franquismo ha sido descabezado.
Cuando en 1974, tras el atentado nunca aclarado, con doce muertos, en la madrileña Calle del Correo contra la cafetería Rolando, frecuentada por policías por lo cercana a la entonces Dirección General de Seguridad y sus temidos sótanos en Sol –hoy ocupada por Esperanza Aguirre como digna sucesora- se detuvo a casi un centenar de personas como “miembros de ETA”, entre ellos a Eva Forest, esposa de Alfonso Sastre, a Mary Luz Fernández y sus familiares, a Vicente Sainz de la Peña, director teatral, a la actriz Mary Paz Ballesteros, al escritor Eliseo Bayo, al obrero de la construcción Antonio Durán, al piloto de Iberia Bernardo Badell y su esposa Mary Carmen Nadal, y a la abogada Lidia Falcón. En ese momento, Cambio 16, que lo denominó, al mejor estilo Poe, “el extraño caso de la calle del Correo”, publicaba una nota de la DGS de días anteriores al atentado, prohibiendo a la policía pararse en los alrededores del edificio y recomendando “no frecuentar la Cafetería Rolando” lo que explica que solo 2 muertos eran policías. Alfonso Sastre, que había logrado escapar a la redada al ver su casa destrozada por la policía -que la denominaba como “cárcel del pueblo”- es detenido en octubre y encarcelado, de nuevo en Carabanchel, acusado de terrorismo etarra. Los presos van a permanecer encarcelados sin juicio entre uno a dos años, salvo Eva Forest y Mary Luz Fernández, que estarán tres años en prisión, sin juicio de ninguna clase, como supuestas terroristas etarras. Mientras tanto, Juan Carlos Borbón había asumido interinamente la Jefatura del Estado desde julio (¡siempre julio!) hasta septiembre, justo cuando el PSOE presenta la “Declaración de Septiembre” , abogando por la ruptura democrática que entendía como el establecimiento de libertades políticas, sindicales y personales y el Derecho a la Autodeterminación de las “nacionalidades” del Estado, refrendada un mes más tarde en el Congreso de Suresnes, que elige a Felipe González como su secretario general, y concibe a España como “República Federal de nacionalidades y regiones” para las que afirma el derecho a la autodeterminación. Aún la izquierda se reclamaba marxista.
Cuando en 1975, año en que comienza a emitir desde Argel “La Voz de Canarias Libre” y, en Canarias, un militante del MPAIAC, Antonio Padilla, es muerto a tiros y el militante obrero de la OPI, Antonio González Ramos, asesinado a golpes por el comisario José Matute Fernández, el régimen fascista español lleva a cabo, el 27 de septiembre, sus últimos fusilamientos públicos en Madrid, Barcelona y Burgos de los miembros del FRAPP Xosé H. Baena, Ramón García y José L. Sánchez y los de ETA Juan Paredes “Txiki” y Ángel Otaegi. La reacción en Euzkadi, con el estado de excepción declarado, fue enorme, con tres días de huelga general y manifestaciones reprimidas a tiros por la Policía y la Guardia Civil. En España, salvo Barcelona, el control policial impidió grandes manifestaciones, pero la reacción internacional fue grande. El fascismo replicó, el primero de octubre, con una de sus habituales grandes manifestaciones de guagua, bocadillo y prietas las filas –la última orquestada en vida del dictador- en la Plaza de Oriente. En el balcón del Palacio Real, con el apoyo de la presencia de Juan Carlos Borbón en su uniforme militar, saludando ambos brazo en alto a los manifestantes, el emocionado dictador, entre lágrimas e hipidos, hace su arenga: “Todas las protestas habidas obedecen a una conspiración masónica izquierdista, de la clase política, en contubernio comunista-terrorista en lo social, que si a nosotros nos honra, a ellos envilece”. Un mes y veinte días se alarga aún la sombra del dictador, cada vez más decreciente. El 20N (día nefasto en los anales fascistas españoles desde José Antonio) un moqueante Arias Navarro –que lo tuvimos en Tenerife de Virrey colonial- anuncia televisivamente “Españoles, Franco ha muerto” y el capitidisminuido “caudillo” emprende viaje al antaño Valle de Cuelgamuros, después “Cuelgamuertos” para los represaliados y, oficialmente, de los Caídos. Juan Carlos Borbón, que ya ejercía la Jefatura del Estado desde octubre y se había dado un paseo como tal por la todavía “provincia española de Sahara-Río de Oro”, es nombrado, el 22N, Rey de España por la Gracia de Franco y Arias asume, aún llorando, la Presidencia del Gobierno. La izquierda espera que el andamiaje fascistoide hispano se derrumbe solo.
Cuando en 1976, Adolfo Suárez, impulsado por los sectores más realistas del franquismo y de la burguesía española, sucede a Arias Navarro, entiende la imposibilidad de continuar aquel franquismo sin Franco y lleva a las Cortes, que la aprueban, la “Ley de Reforma Política”, (negociada con la “Platajunta” producto de la fusión de la “Junta Democrática” auspiciada por el PCE y la “Plataforma Democrática” encabezada por el PSOE). Ratificada en Referéndum en diciembre, con la oposición de boquilla de los partidos de izquierda platajuntados que la habían negociado, por su carácter reformista y no de ruptura con el franquismo. Su aceptación final marca la deriva continuada hacia la derecha que va a sufrir la “izquierda” española, que la conducirá a la aceptación total de una monarquía en la que el Juan Carlos Borbón, en su discurso a la nación en su toma de poder, y tras aclarar que era Rey de España, título que me confieren la tradición histórica, las Leyes Fundamentales del Reino y el mandato legítimo de los españoles, aunque nadie sabe como sucedió ese “mandato legítimo”, dedica un “emocionado homenaje” a su mentor y maestro: “Una figura excepcional entra en la Historia. El nombre de Francisco Franco será ya un jalón del acontecer español y un hito al que será imposible dejar de referirse para entender la clave de nuestra vida política contemporánea. Con respeto y gratitud quiero recordar la figura de quien durante tantos años asumió la pesada responsabilidad de conducir la gobernación del Estado. Su recuerdo constituirá para mí una exigencia de comportamiento y de lealtad para las funciones que asumo al servicio de la Patria.
Ni el flamante Ministro de la Gobernación del gobierno “democrático”, Fraga Iribarne, ni su colega de Relaciones Sindicales, Martín Villa, podían dejar pasar sin su cuota de represión sangrienta un año tan brillante. En Vitoria (lo de Gasteiz aún era tabú) una concentración obrera es disuelta por las FOP al tiro limpio, con 6 obreros asesinados y más de 150 heridos y, en las manifestaciones subsiguientes, 4 asesinados a balazos más. Luego fue Montejurra, donde, preparado por el CECED (travestido luego a CESID y hoy a CNI) con la colaboración de la Guardia Civil, ametrallan a los convocados con dos nuevos muertos.
La izquierda se conforma con la llamada “Ley de Asociaciones Políticas” que ya en su preámbulo reconoce basarse en al Art. 16 del franquista “Fuero de los Españoles” , acatar los “Principios Fundamentales del Reino” y defender “en particular los principios de respeto a la soberanía, unidad, integridad y seguridad de la Nación” y que considera como ilícito penal todos los supuestos recogidos en el Código Penal de 1973 con penas de Prisión mayor, como el Art.123 “los ultrajes a la Nación española o al sentimiento de su unidad, al Estado o su forma política, así como a sus símbolos y emblemas” o el no menos contundente Art.172: “el ataque, por cualquier medio, a la soberanía, unidad o independencia de la Patria, a la integridad de su territorio o a la seguridad nacional”, Código Penal que no impidió que los 6 policías que asesinaron ametrallado, en ese septiembre, en Tenerife a Bartolomé García Lorenzo terminaran sus días “laborales” con cargos en la Policía, incluso alguno como escolta oficial de un exministro socialista.
La Ley de Asociaciones, para que no queden dudas, especifica en su articulo 3:“Se entiende por fines ilícitos los contrarios a los Principios Fundamentales del Movimiento y demás Leyes fundamentales, los sancionados por las leyes penales, los que atenten contra la moral, el orden público y cualesquiera otros que impliquen un peligro para la unidad política y social de España.” Franco tenía razón ¡Todo quedaba atado y bien atado!....y así sigue.
Cuando en 1977, el año comienza con la masacre de los 5 abogados laboralistas en su despacho madrileño de la calle Atocha. El poder político y la ruptura definitiva con el franquismo estuvieron al alcance del pueblo movilizado, pero la “prudencia” (sic) de los partidos de izquierda condujo la indignación pública a un único resultado: la legalización del PCE, eso sí, previa renuncia a toda opción rupturista. Con la oposición domada y con el informe positivo del Consejo Nacional del Movimiento, se aprueba en Cortes la “Ley para la Reforma Política” que abre las puertas a unas Cortes Constituyentes, objetivo común de las opciones de izquierda españolas y de los reformistas del Régimen, desde Fraga a Suárez. La Ley es sometida a Referéndum y con ella se acepta de forma definitiva por parte de los partidos de la izquierda española la bandera rojigualda y la monarquía heredada del fascismo. En Canarias presentamos a la legalización el “Partido Revolucionario Africano de las Islas Canarias” y, además de negárnosla, se nos abrieron diligencias judiciales. Los partidos “legales” o los instrumentales creados al efecto -como “Esquerra de Catalunya”- se presentaron en junio a la primera convocatoria electoral de la monarquía, con la UCD como ganadora. En octubre el Consejo de Ministros del gobierno Suárez decreta la Ley de Amnistía, obligado por la presión popular como las grandes movilizaciones de mayo, reprimidas duramente sobre todo en Euzkadi, con otra vez nueve muertos a balazos represivos, casi al mismo tiempo que el desarme ideológico y social culmina con los Pactos de la Moncloa. Ortega hubiera exclamado ahora ¡Delenda est República…et Autodeterminación”!
Para nosotros, en Canarias, el año termina con otro nuevo asesinato por los “antidisturbios”, en medio de una huelga convocada por la Coordinadora de Sectores en Lucha de los sindicatos nacionalistas como CCT y SOC del estudiante Javier Fernández Quesada a las puertas de la Universidad de Aguere. Le siguió una brutal actuación represiva posterior de los “especiales” traídos desde España por el Virrey colonial, Mardones Sevilla, hoy “nacionalero” destacado de CC.
Cuando en 1978 la ponencia elaborada por los “7 magníficos” (Cisneros, Pérez Llorca y Herrero Rguez. de Miñón de UCD; Fraga de AP; Roca de la coalición Pacte Democràtic per Catalunya, Peces-Barba del PSOE y Solé Tura por el PCE), padres putativos de la Constitución (la paternidad real arranca desde la Ley de Asociaciones Políticas y tiene como abuelos al Fuero de los Españoles) logran que el Congreso de los Diputados apruebe el texto constitucional que luego se ratifica en Referéndum el 6 de diciembre.
Con la Constitución se consagra una visión liberal, indudablemente menos restrictiva que la que inspiraría luego reacciones como la del 23F –en la que aún no se ha aclarado el papel jugado por Juan Carlos Borbón o por Raventós, Enrique Múgica, Ciurana o Tamames entre otros- pero muy lejos de la lucha que se había sostenido por una sociedad socialista, igualitaria, solidaria y respetuosa de los derechos de los hombres y los pueblos, horizontes de los que además, desde entonces, con la derechización, se ha ido progresivamente separándose, compitiendo la “izquierda” con la más rancia derecha hispana en la destrucción total y absoluta de cualquier vestigio de control económico o político por parte del estado sobre los medios de producción o el aparato financiero, desmontando todo el sector público en una carrera frenética en pos de la economía neoliberal, la globalización y “el fin de la historia y el último hombre”.
Esa Constitución, ignora, desde su Título I el amplio porcentaje de los que no nos sentimos en ninguna forma –o no somos- españoles, o los que rechazamos una monarquía decimonónica que, por Ley y definición, consagra la diferencia entre personas por su nacimiento y, por origen, es la herencia del fascismo profundo (Art. 1-2: La soberanía nacional reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del estado”. Art. 1-3: La forma política del Estado español es la Monarquía parlamentaria”) fundamentándola, según su Art. 2 en la “indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles”.
Lo que podíamos esperar los nacionalistas canarios ya nos lo había enseñado desde julio el atentado en Argel contra Antonio Cubillo -con sus graves secuelas físicas- diseñado, como sentenció posteriormente un tribunal, por el Gobierno español y ejecutado por sus servicios secretos y su democrático ministro Martín Villa.
Es innegable el avance que la Constitución española significó para las libertades individuales sobre las posiciones del franquismo puro y duro, incluso en los territorios coloniales no europeos, pero también es indudable que todas estas declaraciones no han logrado, en absoluto, resolver el problema –ni individual ni colectivo- de los que no reconocen esa pertenencia a la Nación española. No ha resuelto los problemas coloniales como el de Canarias o los nacionales de naciones como Catalunya y, sobre todo por el nivel de desarrollo histórico, de Euzkadi. No se trata de ETA que, al fin y al cabo, es un epifenómeno como lo es siempre cualquier acción violenta respecto al fenómeno político. En este caso epifenómeno del no-reconocimiento por el Estado del Derecho de Autodeterminación. Ya en 1977, en el diario “El Mundo” escribía el poco sospechoso Josep Ramoneda que “seguir entendiendo el conflicto del Pueblo Vasco como la acción de una minoría subversiva es imposibilitar la solución del problema”.
Se trata de que la propia Constitución y sus intérpretes -independientemente de su adscripción política- impiden el desarrollo de ese Principio, que múltiples Resoluciones de la ONU como las 1514 o 2200, establecen, y que España -ratificado todas y cada una de ellas- ha impedido sistemáticamente su aplicación, sea en su territorio metropolitano (como con el llamado “Plan Ibarretxe”) sea en la colonia canaria. El remate de ese férreo control lo pusieron, consensuadamente, el tándem PSOE-PP con la “Ley de Partidos” de 2002 “para garantizar el funcionamiento del sistema democrático” según su exposición de motivos y que, en la práctica, a servido a la fiscalía y los tribunales españoles para ilegalizar por sospechas a múltiples partidos de la izquierda abertzale vasca o a españoles como el PCE(r) o para intentarlo como en el caso de Izquierda Castellana (IzCa) finalmente sobreseído, o el actual de I.I.-SP, finalmente reconocido por el Constitucional español….por ahora. Si, como hace Hacienda, “cruzamos los datos” de la Ley de Partidos y la Constitución Española, en el Art. 9-2-c de la primera encontramos que es causa suficiente de ilegalidad el “Complementar y apoyar políticamente la acción de organizaciones terroristas para la consecución de sus fines de subvertir el orden constitucional” y dado que, en el Estado español, el “fin” de ETA es la independencia de una parte del estado, todos y cada uno de los que propugnamos la independencia o la descolonización, atentamos contra el ya transcrito Art. 2 constitucional sobre la “indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles”. Existen Estados de Excepción subrepticiamente declarados.
Creo que, hoy por hoy, y mientras “la larga marcha de la izquierda” para la recuperación de su sentido ético y político en Canarias, en España y en el Mundo continúa, es un hito el encontrarnos con un Alfonso Sastre encabezando un programa de regeneración ética y social. Un Alfonso Sastre hacia el que, forzosamente, tengo que expresar mi solidaridad actual y mi respeto profundo por una trayectoria cultural, intelectual y política plena de valor personal y de coherencia moral. Por ese Alfonso Sastre que pudimos ver en Tenerife, como un paseante más, en la Feria del Libro, acompañado por mi entrañable amigo Rogelio Botanz (y él sabe porqué es para mí entrañable) que ya había puesto música a varios de sus poemas desde 2004, o el Sastre, ya sin compañera y con sus ojos tan tristes como los de Guillermo Tell, que daba talleres de teatro, también en Tenerife y nos sigue dando auténticos talleres de pensamiento y acción de una izquierda que se niega a ser el fin fujiyamasco de la historia o el soporte estético de un sistema político y económico que nos ha llevado al pozo actual.
A pesar de que creo que, por parte e II-SP, hay evidentes fallos de visión en lo que respecta a esta colonia que tengo por patria, como “inter-nacionalista” y como participante de un pensamiento de izquierda socialista y liberadora, utópica para muchos, pero transformadora de una realidad que ni nos gusta ni compartimos, tengo que decirle a Sastre: “Alfonso, Eskerrik asko”. Pa’lante que esta larga marcha continúa.
Canarias a 25 de mayo –Día de la Liberación de África- del 2009
Francisco Javier González
Cuando en 1959, y a raíz de que la “justicia” española asesinara en Las Palmas, a garrote vil, al alzado Juan García Suárez, “El Corredera”, se funda en Gran Canaria el grupo “Canarias Libre” que aglutina a comunistas, a los anticlericales de la llamada “Iglesia Cubana”, a militantes independentistas y a sectores obreros, fundamentalmente la “carga blanca” de los muelles grancanarios. El grupo propuso construir el “Partido Comunista Canario”, pero, a pesar de la teórica reivindicación de Autodeterminación que mantenía el PCE -encabezado por Carrillo- nunca optó por la descolonización real de Canarias y se opuso al proyecto. El centralismo burocrático se impuso a la libre determinación.
Cuando en 1962 y, en Canarias, la policía española desarticula y encarcela a los integrantes de “Canarias Libre”, en España se enviaba a la cárcel a Eva Forest -con su hija recién nacida Eva Sastre- por firmar un artículo apoyando la huelga minera asturiana. La izquierda española dijo que aquello era el fascismo, el mismo que por esos días asesinaba “legalmente” a Julián Grimau. Ese año se casaba Juan Carlos Borbón, educado por Franco desde 1948 para ser su sucesor. Eso, para la izquierda española, también era cosa del franquismo que se acabaría con la III República.
Cuando en 1964 se funda en Argel el MPAIAC y Sekou Touré pide en la Cumbre de los Países No Alineados, la independencia de Canarias recibe el rechazo unánime de la “izquierda” española que teóricamente propugnaba el supuesto apoyo a la Autodeterminación. Antonio Cubillo añade las 7 estrellas verdes a la bandera que en 1961 creara para Canarias Libre D.ª Mª del Carmen Sarmiento y sus hijos Jesús y Arturo Cantero, diseñando así la actual bandera nacional canaria. Solo fue aceptada por los militantes independentistas y anatematizada por el resto.
Cuando en 1966 a Alfonso Sastre se le prohíbe publicar “La Sangre y la Ceniza” (que ya en 1965 recuerdo que se leían capítulos en las Asambleas estudiantiles de la Complutense) seguía, para la “izquierda” española, siendo el fascismo franquista el que, por participar en las madrileñas “Jornadas contra la Represión”, lo lleva de inquilino forzoso a Carabanchel. En pago, Sastre, nos regaló a todos una Balada.
Cuando en 1968 la Organización para la Unidad Africana, OUA, en julio, reconoce el derecho a la independencia de Canarias como islas africanas, todos los partidos españoles, incluidos los que trabajaban en el exilio, rechazan “la ingerencia” de la OUA en los asuntos “españoles”. Eso si, mantenían la Autodeterminación en sus programas. En la grancanaria Sardina del Norte la Guardia Civil española detiene a unos 50 de los más de 400 obreros concentrados en asamblea mientras más de 1.500 obreros portuarios mantenían por 3 días la primera gran huelga antifranquista en el estado Entre ellos a Tony Gallardo. Todavía el PCE y la izquierda creían en la lucha por la libertad.
Cuando en 1969, el dictador, cuya policía acababa de asesinar en Madrid al estudiante Enrique Ruano, declara durante un trimestre el Estado de Excepción, nombra sucesor a Juan Carlos Borbón a “título de Rey” y el susodicho jura sobre la Biblia y ante las Cortes fascistas “cumplir y hacer cumplir las Leyes Fundamentales” del Régimen. El propio dictador en su discurso nos aclara que: “Estimo llegado el momento de proponer a las Cortes Españolas como persona llamada en su día a sucederme, a título de Rey, al Príncipe Don Juan Carlos de Borbón y Borbón, quien, tras haber recibido la adecuada formación para su alta misión y formar parte de los tres Ejércitos, ha dado pruebas fehacientes de su acendrado patriotismo y de su total identificación con los Principios del Movimiento y Leyes Fundamentales del Reino”. Mientras, la izquierda española esperaba por la República que acabaría con el fascismo. Estaba “Esperando a un Godot” que, como el de Beckett, nunca llegó. Mientras, la represión franquista arrecia en Euzkadi, punta de lanza de la lucha antifranquista, donde suma ese año más de 2.000 detenciones, 300 exiliados forzosos y cientos de años de prisión impuestos por el tristemente célebre Tribunal de Orden Público.
Cuando en 1970 la “Justicia” franquista abre el “Proceso de Burgos” contra 16 militantes de ETA (entre ellos algunos dirigentes actuales del PSE-PSOE), acusados de la muerte en 1968 del sanguinario jefe de la Brigada Político Social en Donosti, Melitón Manzanas, y dicta 9 penas de muerte y más de medio milenio de años de prisión, la izquierda española protesta, pero son más de 300 los intelectuales catalanes que mantuvieron un encierro en Montserrat y es el matrimonio Sastre/Forest quién crea el “Comité de Solidaridad con Euzkadi”, país en el que se cebaba cruentamente la represión franquista. La movilización popular fue masiva hasta la consecución de la conmutación de las penas capitales.
Cuando en 1972 y, para más inri, el 18 de julio, Franco firma un decreto disponiendo que Carrero Blanco ocupe, caso de vacante, la Jefatura del Estado, diseña y hace reposar, en la persona del almirante, la continuidad de la ortodoxia franquista.
Cuando en 1973, Franco, que desde 1967 había separado por Ley Orgánica la Jefatura del Estado -que se reserva in aeternam- de la Presidencia del Consejo de Ministros (Presidencia del Gobierno), nombra a Carrero Blanco como Presidente y da la entrada a los ministerios a los “tecnócratas” del Opus Dei –los “López”-, ahonda en su diseño continuista. El nuevo gobierno dura hasta que, finalizando el año, ETA hace subir volando a los altares, pero pasando por los tejados jesuíticos, al Almirante Carrero Blanco –el elefante blanco del Régimen- y deja al franquismo sin el posible sucesor en el caudillaje. No hay lágrimas del pueblo que se derramen por él y si muchas felicitaciones contenidas. Los partidos, legales e ilegales, como PSOE y PCE condenan el atentado, aunque reconocen, sotovocce, que el franquismo ha sido descabezado.
Cuando en 1974, tras el atentado nunca aclarado, con doce muertos, en la madrileña Calle del Correo contra la cafetería Rolando, frecuentada por policías por lo cercana a la entonces Dirección General de Seguridad y sus temidos sótanos en Sol –hoy ocupada por Esperanza Aguirre como digna sucesora- se detuvo a casi un centenar de personas como “miembros de ETA”, entre ellos a Eva Forest, esposa de Alfonso Sastre, a Mary Luz Fernández y sus familiares, a Vicente Sainz de la Peña, director teatral, a la actriz Mary Paz Ballesteros, al escritor Eliseo Bayo, al obrero de la construcción Antonio Durán, al piloto de Iberia Bernardo Badell y su esposa Mary Carmen Nadal, y a la abogada Lidia Falcón. En ese momento, Cambio 16, que lo denominó, al mejor estilo Poe, “el extraño caso de la calle del Correo”, publicaba una nota de la DGS de días anteriores al atentado, prohibiendo a la policía pararse en los alrededores del edificio y recomendando “no frecuentar la Cafetería Rolando” lo que explica que solo 2 muertos eran policías. Alfonso Sastre, que había logrado escapar a la redada al ver su casa destrozada por la policía -que la denominaba como “cárcel del pueblo”- es detenido en octubre y encarcelado, de nuevo en Carabanchel, acusado de terrorismo etarra. Los presos van a permanecer encarcelados sin juicio entre uno a dos años, salvo Eva Forest y Mary Luz Fernández, que estarán tres años en prisión, sin juicio de ninguna clase, como supuestas terroristas etarras. Mientras tanto, Juan Carlos Borbón había asumido interinamente la Jefatura del Estado desde julio (¡siempre julio!) hasta septiembre, justo cuando el PSOE presenta la “Declaración de Septiembre” , abogando por la ruptura democrática que entendía como el establecimiento de libertades políticas, sindicales y personales y el Derecho a la Autodeterminación de las “nacionalidades” del Estado, refrendada un mes más tarde en el Congreso de Suresnes, que elige a Felipe González como su secretario general, y concibe a España como “República Federal de nacionalidades y regiones” para las que afirma el derecho a la autodeterminación. Aún la izquierda se reclamaba marxista.
Cuando en 1975, año en que comienza a emitir desde Argel “La Voz de Canarias Libre” y, en Canarias, un militante del MPAIAC, Antonio Padilla, es muerto a tiros y el militante obrero de la OPI, Antonio González Ramos, asesinado a golpes por el comisario José Matute Fernández, el régimen fascista español lleva a cabo, el 27 de septiembre, sus últimos fusilamientos públicos en Madrid, Barcelona y Burgos de los miembros del FRAPP Xosé H. Baena, Ramón García y José L. Sánchez y los de ETA Juan Paredes “Txiki” y Ángel Otaegi. La reacción en Euzkadi, con el estado de excepción declarado, fue enorme, con tres días de huelga general y manifestaciones reprimidas a tiros por la Policía y la Guardia Civil. En España, salvo Barcelona, el control policial impidió grandes manifestaciones, pero la reacción internacional fue grande. El fascismo replicó, el primero de octubre, con una de sus habituales grandes manifestaciones de guagua, bocadillo y prietas las filas –la última orquestada en vida del dictador- en la Plaza de Oriente. En el balcón del Palacio Real, con el apoyo de la presencia de Juan Carlos Borbón en su uniforme militar, saludando ambos brazo en alto a los manifestantes, el emocionado dictador, entre lágrimas e hipidos, hace su arenga: “Todas las protestas habidas obedecen a una conspiración masónica izquierdista, de la clase política, en contubernio comunista-terrorista en lo social, que si a nosotros nos honra, a ellos envilece”. Un mes y veinte días se alarga aún la sombra del dictador, cada vez más decreciente. El 20N (día nefasto en los anales fascistas españoles desde José Antonio) un moqueante Arias Navarro –que lo tuvimos en Tenerife de Virrey colonial- anuncia televisivamente “Españoles, Franco ha muerto” y el capitidisminuido “caudillo” emprende viaje al antaño Valle de Cuelgamuros, después “Cuelgamuertos” para los represaliados y, oficialmente, de los Caídos. Juan Carlos Borbón, que ya ejercía la Jefatura del Estado desde octubre y se había dado un paseo como tal por la todavía “provincia española de Sahara-Río de Oro”, es nombrado, el 22N, Rey de España por la Gracia de Franco y Arias asume, aún llorando, la Presidencia del Gobierno. La izquierda espera que el andamiaje fascistoide hispano se derrumbe solo.
Cuando en 1976, Adolfo Suárez, impulsado por los sectores más realistas del franquismo y de la burguesía española, sucede a Arias Navarro, entiende la imposibilidad de continuar aquel franquismo sin Franco y lleva a las Cortes, que la aprueban, la “Ley de Reforma Política”, (negociada con la “Platajunta” producto de la fusión de la “Junta Democrática” auspiciada por el PCE y la “Plataforma Democrática” encabezada por el PSOE). Ratificada en Referéndum en diciembre, con la oposición de boquilla de los partidos de izquierda platajuntados que la habían negociado, por su carácter reformista y no de ruptura con el franquismo. Su aceptación final marca la deriva continuada hacia la derecha que va a sufrir la “izquierda” española, que la conducirá a la aceptación total de una monarquía en la que el Juan Carlos Borbón, en su discurso a la nación en su toma de poder, y tras aclarar que era Rey de España, título que me confieren la tradición histórica, las Leyes Fundamentales del Reino y el mandato legítimo de los españoles, aunque nadie sabe como sucedió ese “mandato legítimo”, dedica un “emocionado homenaje” a su mentor y maestro: “Una figura excepcional entra en la Historia. El nombre de Francisco Franco será ya un jalón del acontecer español y un hito al que será imposible dejar de referirse para entender la clave de nuestra vida política contemporánea. Con respeto y gratitud quiero recordar la figura de quien durante tantos años asumió la pesada responsabilidad de conducir la gobernación del Estado. Su recuerdo constituirá para mí una exigencia de comportamiento y de lealtad para las funciones que asumo al servicio de la Patria.
Ni el flamante Ministro de la Gobernación del gobierno “democrático”, Fraga Iribarne, ni su colega de Relaciones Sindicales, Martín Villa, podían dejar pasar sin su cuota de represión sangrienta un año tan brillante. En Vitoria (lo de Gasteiz aún era tabú) una concentración obrera es disuelta por las FOP al tiro limpio, con 6 obreros asesinados y más de 150 heridos y, en las manifestaciones subsiguientes, 4 asesinados a balazos más. Luego fue Montejurra, donde, preparado por el CECED (travestido luego a CESID y hoy a CNI) con la colaboración de la Guardia Civil, ametrallan a los convocados con dos nuevos muertos.
La izquierda se conforma con la llamada “Ley de Asociaciones Políticas” que ya en su preámbulo reconoce basarse en al Art. 16 del franquista “Fuero de los Españoles” , acatar los “Principios Fundamentales del Reino” y defender “en particular los principios de respeto a la soberanía, unidad, integridad y seguridad de la Nación” y que considera como ilícito penal todos los supuestos recogidos en el Código Penal de 1973 con penas de Prisión mayor, como el Art.123 “los ultrajes a la Nación española o al sentimiento de su unidad, al Estado o su forma política, así como a sus símbolos y emblemas” o el no menos contundente Art.172: “el ataque, por cualquier medio, a la soberanía, unidad o independencia de la Patria, a la integridad de su territorio o a la seguridad nacional”, Código Penal que no impidió que los 6 policías que asesinaron ametrallado, en ese septiembre, en Tenerife a Bartolomé García Lorenzo terminaran sus días “laborales” con cargos en la Policía, incluso alguno como escolta oficial de un exministro socialista.
La Ley de Asociaciones, para que no queden dudas, especifica en su articulo 3:“Se entiende por fines ilícitos los contrarios a los Principios Fundamentales del Movimiento y demás Leyes fundamentales, los sancionados por las leyes penales, los que atenten contra la moral, el orden público y cualesquiera otros que impliquen un peligro para la unidad política y social de España.” Franco tenía razón ¡Todo quedaba atado y bien atado!....y así sigue.
Cuando en 1977, el año comienza con la masacre de los 5 abogados laboralistas en su despacho madrileño de la calle Atocha. El poder político y la ruptura definitiva con el franquismo estuvieron al alcance del pueblo movilizado, pero la “prudencia” (sic) de los partidos de izquierda condujo la indignación pública a un único resultado: la legalización del PCE, eso sí, previa renuncia a toda opción rupturista. Con la oposición domada y con el informe positivo del Consejo Nacional del Movimiento, se aprueba en Cortes la “Ley para la Reforma Política” que abre las puertas a unas Cortes Constituyentes, objetivo común de las opciones de izquierda españolas y de los reformistas del Régimen, desde Fraga a Suárez. La Ley es sometida a Referéndum y con ella se acepta de forma definitiva por parte de los partidos de la izquierda española la bandera rojigualda y la monarquía heredada del fascismo. En Canarias presentamos a la legalización el “Partido Revolucionario Africano de las Islas Canarias” y, además de negárnosla, se nos abrieron diligencias judiciales. Los partidos “legales” o los instrumentales creados al efecto -como “Esquerra de Catalunya”- se presentaron en junio a la primera convocatoria electoral de la monarquía, con la UCD como ganadora. En octubre el Consejo de Ministros del gobierno Suárez decreta la Ley de Amnistía, obligado por la presión popular como las grandes movilizaciones de mayo, reprimidas duramente sobre todo en Euzkadi, con otra vez nueve muertos a balazos represivos, casi al mismo tiempo que el desarme ideológico y social culmina con los Pactos de la Moncloa. Ortega hubiera exclamado ahora ¡Delenda est República…et Autodeterminación”!
Para nosotros, en Canarias, el año termina con otro nuevo asesinato por los “antidisturbios”, en medio de una huelga convocada por la Coordinadora de Sectores en Lucha de los sindicatos nacionalistas como CCT y SOC del estudiante Javier Fernández Quesada a las puertas de la Universidad de Aguere. Le siguió una brutal actuación represiva posterior de los “especiales” traídos desde España por el Virrey colonial, Mardones Sevilla, hoy “nacionalero” destacado de CC.
Cuando en 1978 la ponencia elaborada por los “7 magníficos” (Cisneros, Pérez Llorca y Herrero Rguez. de Miñón de UCD; Fraga de AP; Roca de la coalición Pacte Democràtic per Catalunya, Peces-Barba del PSOE y Solé Tura por el PCE), padres putativos de la Constitución (la paternidad real arranca desde la Ley de Asociaciones Políticas y tiene como abuelos al Fuero de los Españoles) logran que el Congreso de los Diputados apruebe el texto constitucional que luego se ratifica en Referéndum el 6 de diciembre.
Con la Constitución se consagra una visión liberal, indudablemente menos restrictiva que la que inspiraría luego reacciones como la del 23F –en la que aún no se ha aclarado el papel jugado por Juan Carlos Borbón o por Raventós, Enrique Múgica, Ciurana o Tamames entre otros- pero muy lejos de la lucha que se había sostenido por una sociedad socialista, igualitaria, solidaria y respetuosa de los derechos de los hombres y los pueblos, horizontes de los que además, desde entonces, con la derechización, se ha ido progresivamente separándose, compitiendo la “izquierda” con la más rancia derecha hispana en la destrucción total y absoluta de cualquier vestigio de control económico o político por parte del estado sobre los medios de producción o el aparato financiero, desmontando todo el sector público en una carrera frenética en pos de la economía neoliberal, la globalización y “el fin de la historia y el último hombre”.
Esa Constitución, ignora, desde su Título I el amplio porcentaje de los que no nos sentimos en ninguna forma –o no somos- españoles, o los que rechazamos una monarquía decimonónica que, por Ley y definición, consagra la diferencia entre personas por su nacimiento y, por origen, es la herencia del fascismo profundo (Art. 1-2: La soberanía nacional reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del estado”. Art. 1-3: La forma política del Estado español es la Monarquía parlamentaria”) fundamentándola, según su Art. 2 en la “indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles”.
Lo que podíamos esperar los nacionalistas canarios ya nos lo había enseñado desde julio el atentado en Argel contra Antonio Cubillo -con sus graves secuelas físicas- diseñado, como sentenció posteriormente un tribunal, por el Gobierno español y ejecutado por sus servicios secretos y su democrático ministro Martín Villa.
Es innegable el avance que la Constitución española significó para las libertades individuales sobre las posiciones del franquismo puro y duro, incluso en los territorios coloniales no europeos, pero también es indudable que todas estas declaraciones no han logrado, en absoluto, resolver el problema –ni individual ni colectivo- de los que no reconocen esa pertenencia a la Nación española. No ha resuelto los problemas coloniales como el de Canarias o los nacionales de naciones como Catalunya y, sobre todo por el nivel de desarrollo histórico, de Euzkadi. No se trata de ETA que, al fin y al cabo, es un epifenómeno como lo es siempre cualquier acción violenta respecto al fenómeno político. En este caso epifenómeno del no-reconocimiento por el Estado del Derecho de Autodeterminación. Ya en 1977, en el diario “El Mundo” escribía el poco sospechoso Josep Ramoneda que “seguir entendiendo el conflicto del Pueblo Vasco como la acción de una minoría subversiva es imposibilitar la solución del problema”.
Se trata de que la propia Constitución y sus intérpretes -independientemente de su adscripción política- impiden el desarrollo de ese Principio, que múltiples Resoluciones de la ONU como las 1514 o 2200, establecen, y que España -ratificado todas y cada una de ellas- ha impedido sistemáticamente su aplicación, sea en su territorio metropolitano (como con el llamado “Plan Ibarretxe”) sea en la colonia canaria. El remate de ese férreo control lo pusieron, consensuadamente, el tándem PSOE-PP con la “Ley de Partidos” de 2002 “para garantizar el funcionamiento del sistema democrático” según su exposición de motivos y que, en la práctica, a servido a la fiscalía y los tribunales españoles para ilegalizar por sospechas a múltiples partidos de la izquierda abertzale vasca o a españoles como el PCE(r) o para intentarlo como en el caso de Izquierda Castellana (IzCa) finalmente sobreseído, o el actual de I.I.-SP, finalmente reconocido por el Constitucional español….por ahora. Si, como hace Hacienda, “cruzamos los datos” de la Ley de Partidos y la Constitución Española, en el Art. 9-2-c de la primera encontramos que es causa suficiente de ilegalidad el “Complementar y apoyar políticamente la acción de organizaciones terroristas para la consecución de sus fines de subvertir el orden constitucional” y dado que, en el Estado español, el “fin” de ETA es la independencia de una parte del estado, todos y cada uno de los que propugnamos la independencia o la descolonización, atentamos contra el ya transcrito Art. 2 constitucional sobre la “indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles”. Existen Estados de Excepción subrepticiamente declarados.
Creo que, hoy por hoy, y mientras “la larga marcha de la izquierda” para la recuperación de su sentido ético y político en Canarias, en España y en el Mundo continúa, es un hito el encontrarnos con un Alfonso Sastre encabezando un programa de regeneración ética y social. Un Alfonso Sastre hacia el que, forzosamente, tengo que expresar mi solidaridad actual y mi respeto profundo por una trayectoria cultural, intelectual y política plena de valor personal y de coherencia moral. Por ese Alfonso Sastre que pudimos ver en Tenerife, como un paseante más, en la Feria del Libro, acompañado por mi entrañable amigo Rogelio Botanz (y él sabe porqué es para mí entrañable) que ya había puesto música a varios de sus poemas desde 2004, o el Sastre, ya sin compañera y con sus ojos tan tristes como los de Guillermo Tell, que daba talleres de teatro, también en Tenerife y nos sigue dando auténticos talleres de pensamiento y acción de una izquierda que se niega a ser el fin fujiyamasco de la historia o el soporte estético de un sistema político y económico que nos ha llevado al pozo actual.
A pesar de que creo que, por parte e II-SP, hay evidentes fallos de visión en lo que respecta a esta colonia que tengo por patria, como “inter-nacionalista” y como participante de un pensamiento de izquierda socialista y liberadora, utópica para muchos, pero transformadora de una realidad que ni nos gusta ni compartimos, tengo que decirle a Sastre: “Alfonso, Eskerrik asko”. Pa’lante que esta larga marcha continúa.
Canarias a 25 de mayo –Día de la Liberación de África- del 2009
Francisco Javier González
martes, 26 de mayo de 2009
Espabila!!! Que hay concierto
lunes, 25 de mayo de 2009
La izquierda abertzale pide a los independentistas que voten Iniciativa Internacionalista
La Izquierda Abertzale planteó hace cerca de una década que en ciertas elecciones, en las que se puede aparecer como pueblo, que la unión de fuerzas abertzales y de izquierdas es imprescindible para poder avanzar hacia un marco en la que la independencia y el socialismo sean posibles. Así lo propusimos en Bergara y así lo hemos intentado también en estas elecciones europeas.
Sin embargo han primado intereses de partido por lo que no ha sido posible realizar esa unión en estas elecciones. Asimismo, la izquierda abertzale sufre desde hace años una persecuación y apartheid que le imposibilitan participar normalizadamenten en las elecciones. Nuestra segunda opción era, por lo tanto, presentarse como Izquierda Abertzale.
Creemos que las elecciones europeas son importantes de cara al futuro inmediato por las siguientes claves:
- La necesidad de poner en marcha un proceso de fortalecimiento de un bloque independentista.
- La importancia de implicar a la comunidad internacional en la busqueda de soluciones democráticas para Euskal Herria.
- La importancia de la implicación europea en esa solución entendiendo además que la unión ha avalado la creación de nuevos estados si esa es una reclamación mayoritaria de una nación y si además esa voluntad se articula de forma democrática.
Como hemos dicho la izquierda abertzale apostaba por una candidatura en clave de pueblo para aparecer ante Europa. Si eso no fuera posible, querríamos habernos medido como izquierda abertzale. Ninguna de esas opciones ha sido posible.
Estos últimos días hemos recibido por parte de Iniciativa Internacionalista una invitación a los abertzales de izquierda para apoyar su candidatura. Es evidente que no siendo esa coalición la propia de la Izquierda Abertzale. Esa petición merecía tenerla en consideración. La izquierda abertzale quiere responder a esta invitación señalando lo siguiente:
- Compartimos básicamente los principios del manifiesto hecho público por iniciativa.
- Que compartimos y saludamos fundamentalmente los principios de cambio social y la defensa del derecho de autodeterminación para Euskal Herria y el resto de pueblos del estado que hace dicha coalición.
- Que compartimos la defensa de la necesidad de un proceso de diálogo y negociación para resolver el conflicto político existente que hace dicha coalición.
En este sentido la Izquierda Abertzale hace un llamamiento a l@s independentistas de izquierdas para votar Iniciativa Internacionalista en las próximas europeas. Extendemos asimismo este llamamiento a los sectores populares, abertzales y de izquierdas de Euskal Herria. Este voto servirá:
- Para denunciar la situación antidemocrática que padece Euskal Herira.
- Para reclamar un modelo social socialista para Euskal Herria y Europa.
- Para demandar la implicación de Europa y la comunidad internacional en la búsqueda de una solución pacífica y democrática al conflicto político.
- Para reclamar un escenario de diálogo y negociación que permita a nuestro pueblo decidir libre y democráticamente su futuro.
Por todo ello, Alfonso Sastre Europara!
Sin embargo han primado intereses de partido por lo que no ha sido posible realizar esa unión en estas elecciones. Asimismo, la izquierda abertzale sufre desde hace años una persecuación y apartheid que le imposibilitan participar normalizadamenten en las elecciones. Nuestra segunda opción era, por lo tanto, presentarse como Izquierda Abertzale.
Creemos que las elecciones europeas son importantes de cara al futuro inmediato por las siguientes claves:
- La necesidad de poner en marcha un proceso de fortalecimiento de un bloque independentista.
- La importancia de implicar a la comunidad internacional en la busqueda de soluciones democráticas para Euskal Herria.
- La importancia de la implicación europea en esa solución entendiendo además que la unión ha avalado la creación de nuevos estados si esa es una reclamación mayoritaria de una nación y si además esa voluntad se articula de forma democrática.
Como hemos dicho la izquierda abertzale apostaba por una candidatura en clave de pueblo para aparecer ante Europa. Si eso no fuera posible, querríamos habernos medido como izquierda abertzale. Ninguna de esas opciones ha sido posible.
Estos últimos días hemos recibido por parte de Iniciativa Internacionalista una invitación a los abertzales de izquierda para apoyar su candidatura. Es evidente que no siendo esa coalición la propia de la Izquierda Abertzale. Esa petición merecía tenerla en consideración. La izquierda abertzale quiere responder a esta invitación señalando lo siguiente:
- Compartimos básicamente los principios del manifiesto hecho público por iniciativa.
- Que compartimos y saludamos fundamentalmente los principios de cambio social y la defensa del derecho de autodeterminación para Euskal Herria y el resto de pueblos del estado que hace dicha coalición.
- Que compartimos la defensa de la necesidad de un proceso de diálogo y negociación para resolver el conflicto político existente que hace dicha coalición.
En este sentido la Izquierda Abertzale hace un llamamiento a l@s independentistas de izquierdas para votar Iniciativa Internacionalista en las próximas europeas. Extendemos asimismo este llamamiento a los sectores populares, abertzales y de izquierdas de Euskal Herria. Este voto servirá:
- Para denunciar la situación antidemocrática que padece Euskal Herira.
- Para reclamar un modelo social socialista para Euskal Herria y Europa.
- Para demandar la implicación de Europa y la comunidad internacional en la búsqueda de una solución pacífica y democrática al conflicto político.
- Para reclamar un escenario de diálogo y negociación que permita a nuestro pueblo decidir libre y democráticamente su futuro.
Por todo ello, Alfonso Sastre Europara!
martes, 19 de mayo de 2009
Luis Morera: "España debe pedir perdón por el genocidio en Canarias"
El fundador de Taburiente, Luis Morera, apela a la memoria histórica para reivindicar el pasado de Canarias. En su opinión, sin tener en cuenta el pasado es imposible construir el futuro, algo que la política canaria "que se dice nacionalista" no suele tener en cuenta a la hora de tomar decisiones.
Luis Morera, a lo largo del análisis que como artista e intelectual efectua de la política canaria, hace hincapié en que sin conocer el pasado de las Islas, sin pactar con todo lo que sucedió mediante el reconocimiento y el debate, no puede haber un buen futuro. Además, considera que el presente está mediatizado por todo ese pasado de cruel conquista que no se tiene en cuenta. Reivindica la memoria histórica, pero en este caso la de la Islas,que pasa por el reconocimiento de lo que sucedió en Canarias en el tiempo en el que se estuvieron conquistando las Islas, recordando especialmente que no fue precisamente un proceso pacífico sino tortuoso y difícil, sangriento y lleno de humillaciones para quienes eran los pobladores originarios del Archipiélago. Algo que, para él, todavía duele.
La visión que este creador, alma de Taburiente, tiene de la política canaria es tan crítica y peculiar como él mismo, pues la interpreta como fruto "de una pérdida de identidad, de un olvido de la memoria de nuestros ancestros, un reflejo del deterioro del territorio". Que se invierta sólo lo mínimo en cultura le parece una de las principales consecuencias de cómo se hace la política en las Islas. Unas islas donde "hay más interés en hacer campos de golf que en la reflexión, y eso es pan para hoy y hambre para mañana, porque luego el campo de verdad, el que se cultiva, está abandonado".
Morera señala que, sobre todo tal y como está en la actualidad la economía, "La Palma podría ser una auténtica despensa para Canarias, pero no se potencia, todo ha de ser turismo". Los cimientos de lo que sucede, y de lo que sucederá, "reside en la educación de base, la que se imparte en escuelas e institutos, y no se enseña bien", algo que comprueba personalmente cuando acude a estos centros de estudios a impartir charlas.
"En Elche cualquier chiquillo conoce el valor de un icono como la Dama de Elche, pero eso sería imposible en Canarias respecto a un símbolo como el Ídolo de Tara", algo que da idea "de cómo nuestra manera de ser se diluye en la avalancha de lo que llega". Para el creador palmero, estas Islas se están convirtiendo en una especie de "souvenir del mundo".
Si tuviese la oportunidad de intervenir en el Parlamento de Canarias, Morera reclamaría "ahora que se puede, debido a la Ley de Memoria Histórica, que España se disculpe por el genocidio de toda una raza porque aquí no había monos, había seres humanos que sufrieron lo indecible aquella conquista feroz".
La prueba del absoluto olvido de la Historia la encuentra "en el hecho de que un Parlamento permita que se procesione el Pendón de la Conquista, siendo como es el símbolo de aquella terrible represión que llevó a muchos a tirarse desde los riscos". "Ese dolor -continúa- es nuestro dolor y ahora es el momento de que Canarias cure su herida" con la Ley de Memoria Histórica, "para que de una vez por todas se acabe el eterno enconamiento entre Canarias y España".
Imaginar que forma parte de un Ejecutivo canario significaría para Luis Morera tener la oportunidad "de trabajar para que Canarias pueda ser reconocida como una nación ante todo el mundo, no para separarnos de él sino para unirse siendo ella misma, con su enorme patrimonio natural". Por lo demás, Morera demandaría "cultura, cultura y más cultura a fin de fortalecer el futuro". "Los niños no saben qué sucedió en el pasado en esta tierra, somos simplemente el Hawai de España, yo invertiría la mitad del presupuesto público de Canarias en cultura", por aquello de que no hay más futuro que ese.
El artista pone este fenómeno en relación con la escasa atención que se pone en la cultura y en la educación. Desde su punto de vista, lo que está sucediendo es que los políticos que concurren a las elecciones "se juegan sus escaños, y se reparten entre sí los cargos" con la mayor de las frivolidades, como si la política no supusiera la toma de decisiones importantes, decisiones que transforman paisajes, que construyen economía y que diseñan futuro.
En cuanto a la implicación que la población de las Islas tiene respecto a la política, Morera considera que la gente "se aleja cada vez más" de todos los procesos que suponen elección de unos representantes responsables de gestionar el dinero público y de tomar las decisiones que nos afectan a todos.
"Se presentan a las elecciones, ganan, pero luego a lo mejor se mete otro en el puesto, depende de lo que interese", señala el artista a lo largo de su análisis.
La consecuencia de todo ello es que "el ciudadano de a pie acaba por no creer en la política" por lo que finalmente todo adquiere más bien el aspecto de una puesta en escena. "Se da la circunstancia de que ahora, cuando se vota a un partido político determinado, se hace como si se votara a un club deportivo, sin el menor transfondo ideológico, sin espíritu crítico", aduce Morera. "Nadie cree en la política", insiste.
Empresa cultural para "avivar" el arte
La historia de Luis Morera, vinculada indisolublemente a la del grupo musical Taburiente, es la de una persona inquieta, que se pregunta por qué ocurren las cosas que le rodean tras meses de contemplación, "interpretando cada tono del silbido del viento que corta los profundos y verdes barrancos de la Isla Bonita", en la que nació y en la que vive, crea y trabaja.
A Morera no le van los límites creativos y le resulta difícil elegir una sola disciplina artística en la que expresarse. Pero sabe que no son tiempos fáciles para quienes desean vivir de la creación artística, de ahí que haya montado junto a un grupo de afines Avivarte, una empresa cultural, con la idea de convertirse en su propio empresario y poder difundir lo que se haga desde el grupo: escultura, jardines, pintura , poesía, música... El próximo viernes, en la capital grancanaria, presentará su último espectáculo musical titulado Intimando con Luis Morera. Más música.
Luis Morera, a lo largo del análisis que como artista e intelectual efectua de la política canaria, hace hincapié en que sin conocer el pasado de las Islas, sin pactar con todo lo que sucedió mediante el reconocimiento y el debate, no puede haber un buen futuro. Además, considera que el presente está mediatizado por todo ese pasado de cruel conquista que no se tiene en cuenta. Reivindica la memoria histórica, pero en este caso la de la Islas,que pasa por el reconocimiento de lo que sucedió en Canarias en el tiempo en el que se estuvieron conquistando las Islas, recordando especialmente que no fue precisamente un proceso pacífico sino tortuoso y difícil, sangriento y lleno de humillaciones para quienes eran los pobladores originarios del Archipiélago. Algo que, para él, todavía duele.
La visión que este creador, alma de Taburiente, tiene de la política canaria es tan crítica y peculiar como él mismo, pues la interpreta como fruto "de una pérdida de identidad, de un olvido de la memoria de nuestros ancestros, un reflejo del deterioro del territorio". Que se invierta sólo lo mínimo en cultura le parece una de las principales consecuencias de cómo se hace la política en las Islas. Unas islas donde "hay más interés en hacer campos de golf que en la reflexión, y eso es pan para hoy y hambre para mañana, porque luego el campo de verdad, el que se cultiva, está abandonado".
Morera señala que, sobre todo tal y como está en la actualidad la economía, "La Palma podría ser una auténtica despensa para Canarias, pero no se potencia, todo ha de ser turismo". Los cimientos de lo que sucede, y de lo que sucederá, "reside en la educación de base, la que se imparte en escuelas e institutos, y no se enseña bien", algo que comprueba personalmente cuando acude a estos centros de estudios a impartir charlas.
"En Elche cualquier chiquillo conoce el valor de un icono como la Dama de Elche, pero eso sería imposible en Canarias respecto a un símbolo como el Ídolo de Tara", algo que da idea "de cómo nuestra manera de ser se diluye en la avalancha de lo que llega". Para el creador palmero, estas Islas se están convirtiendo en una especie de "souvenir del mundo".
Si tuviese la oportunidad de intervenir en el Parlamento de Canarias, Morera reclamaría "ahora que se puede, debido a la Ley de Memoria Histórica, que España se disculpe por el genocidio de toda una raza porque aquí no había monos, había seres humanos que sufrieron lo indecible aquella conquista feroz".
La prueba del absoluto olvido de la Historia la encuentra "en el hecho de que un Parlamento permita que se procesione el Pendón de la Conquista, siendo como es el símbolo de aquella terrible represión que llevó a muchos a tirarse desde los riscos". "Ese dolor -continúa- es nuestro dolor y ahora es el momento de que Canarias cure su herida" con la Ley de Memoria Histórica, "para que de una vez por todas se acabe el eterno enconamiento entre Canarias y España".
Imaginar que forma parte de un Ejecutivo canario significaría para Luis Morera tener la oportunidad "de trabajar para que Canarias pueda ser reconocida como una nación ante todo el mundo, no para separarnos de él sino para unirse siendo ella misma, con su enorme patrimonio natural". Por lo demás, Morera demandaría "cultura, cultura y más cultura a fin de fortalecer el futuro". "Los niños no saben qué sucedió en el pasado en esta tierra, somos simplemente el Hawai de España, yo invertiría la mitad del presupuesto público de Canarias en cultura", por aquello de que no hay más futuro que ese.
El artista pone este fenómeno en relación con la escasa atención que se pone en la cultura y en la educación. Desde su punto de vista, lo que está sucediendo es que los políticos que concurren a las elecciones "se juegan sus escaños, y se reparten entre sí los cargos" con la mayor de las frivolidades, como si la política no supusiera la toma de decisiones importantes, decisiones que transforman paisajes, que construyen economía y que diseñan futuro.
En cuanto a la implicación que la población de las Islas tiene respecto a la política, Morera considera que la gente "se aleja cada vez más" de todos los procesos que suponen elección de unos representantes responsables de gestionar el dinero público y de tomar las decisiones que nos afectan a todos.
"Se presentan a las elecciones, ganan, pero luego a lo mejor se mete otro en el puesto, depende de lo que interese", señala el artista a lo largo de su análisis.
La consecuencia de todo ello es que "el ciudadano de a pie acaba por no creer en la política" por lo que finalmente todo adquiere más bien el aspecto de una puesta en escena. "Se da la circunstancia de que ahora, cuando se vota a un partido político determinado, se hace como si se votara a un club deportivo, sin el menor transfondo ideológico, sin espíritu crítico", aduce Morera. "Nadie cree en la política", insiste.
Empresa cultural para "avivar" el arte
La historia de Luis Morera, vinculada indisolublemente a la del grupo musical Taburiente, es la de una persona inquieta, que se pregunta por qué ocurren las cosas que le rodean tras meses de contemplación, "interpretando cada tono del silbido del viento que corta los profundos y verdes barrancos de la Isla Bonita", en la que nació y en la que vive, crea y trabaja.
A Morera no le van los límites creativos y le resulta difícil elegir una sola disciplina artística en la que expresarse. Pero sabe que no son tiempos fáciles para quienes desean vivir de la creación artística, de ahí que haya montado junto a un grupo de afines Avivarte, una empresa cultural, con la idea de convertirse en su propio empresario y poder difundir lo que se haga desde el grupo: escultura, jardines, pintura , poesía, música... El próximo viernes, en la capital grancanaria, presentará su último espectáculo musical titulado Intimando con Luis Morera. Más música.
lunes, 18 de mayo de 2009
“Psicología del hombre canario”, el libro que nos diagnosticó como pueblo
Psicología del hombre canario es una obra fundamental para entender no solo la idiosincrasia de nuestra gente, sino las causas que han conformado el perfil psicológico del pueblo canario. El autor es Manuel Alemán (Agaete 1931-Las Palmas de G.C. 1991), teólogo, psicólogo, escritor, y catedrático de Psicología de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.
Psicología del hombre canario fue sin duda la obra cumbre de Manuel Alemán marcando un antes y un después en la toma de conciencia nacional de nuestro pueblo. El pensamiento del autor está claramente influenciado por la Teología de la Liberación y la figura del sacerdote suramericano Camilo Torres, y en su obra cita a teóricos del anticolonialismo como Albert Memmi. Fue publicado en 1980 y fue pionero –y sigue siéndolo- en el método riguroso y dialéctico de explicar la historia y psicología del isleño. A pesar de haber coincidido su publicación en una época de auge del despertar de la conciencia nacional y del Movimiento de liberación nacional, su influencia en el discurso y toma de conciencia colectiva fue, en nuestra opinión, muy relativa. Algo que contrasta con la calidad de la obra y su gran perspectiva innovadora.
Psicología del hombre canario abarca temas como la percepción de la consciencia de canariedad por el isleño y sus distintos niveles, sin olvidar los factores objetivos. La canariedad objetivamente es el resultado de factores objetivos: la geografía, historia, raza, cultura y lengua. Nuestra ubicación en el mundo y la realidad africana y archipielágica, la historia peculiar, el mestizaje específico que ha forjado una cultura concreta y una modalidad lingüística dialectal del castellano única en el mundo. Por otro lado los factores psicológicos y subjetivos divididos en diversos niveles (inconsciente, preconsciente y consciente). La influencia del paisaje y la historia en nuestra mentalidad también son analizadas.
Tras este tanteo general, Alemán pega a profundizar en cuestiones más concretas que afectan a nuestra manera de pensar como la rivalidad infantil entre pueblos e islas, la disfunción de la conciencia o el mimetismo entre otros. “Es una rivalidad infantil, atacando con nombretes y apodos, provocando contiendas ingenuas entre pueblos y entre islas, planteando litigios sobre datos del paisaje, -mi pueblo o isla es más bonito- sobre la modalidad de la voz –unos pueblos ridiculizan a otros su forma de expresarse-. Esta rivalidad es una consecuencia de la inseguridad básica, de la inestabilidad psicológica y sociológica del canario. (…) Es síntoma de la agresividad desplazada del canario: la falta de localización de la causa verdadera de la expoliación de nuestra gente hasta ser indigentes de todo, le lleva a canalizar su agresividad hacia otras realidades inocentes. Es una rivalidad que agudiza los sentimientos localistas del pequeño pueblo, con la consecuente pérdida de conciencia de región. Ha sido una rivalidad manipulada por los dirigentes del Archipiélago.” Al respecto de la Disfunción de la conciencia explica que “El sistema sociocultural canario feudalista, mercantilista, capitalista, ha atenazado al hombre isleño en estratos tan profundos de la psique, como es la conciencia. Esto hace que el explotado se identifique con su explotador, justificándolo, racionalizándolo. El Mimetismo es una postura imitativa de las formas exteriores. “El mimetismo es, por tanto, un mecanismo de defensa promovido desde la lucha por la existencia, desde la necesidad de sobrevivir”. “Todos los pueblos dominados han sufrido este fenómeno de “infancia psicológica”, convirtiéndose en pueblos imitadores para así, en la seguridad del “padre”, paliar la incertidumbre de su inconsistencia. Y este es el caso de Canarias. Parece como si el temor al padre”, en nuestro caso Castilla-Europa, le impulsara a imitarlo para así evitar su enfado y su amenaza.”
Finalmente el autor esboza una propuesta para encarar el futuro de Canarias donde asigna un papel primordial a la concienciación y la conquista de la cultura negada del país. Quizás esta sea de las más notables exposiciones teóricas de la regeneración psicológica de nuestro pueblo mediante la cultura y la identidad.
Psicología del hombre canario es una auténtica ofrenda de Manuel Alemán a su pueblo. Una herramienta teórica básica para abordar nuestra conciencia y transformarla. Paso prioritario –antes que los votos y las siglas- que constituye sin duda alguna los cimientos de el país que queremos construir. Aunque esta impagable obra esté de rabiosa actualidad casi treinta años después, no vamos a negar que los tiempos han cambiado vertiginosamente, y seguramente nuevos factores están ya afectando a nuestra psicología colectiva como pueblo. La terciarización extrema del modelo económico, el desarraigo urbano y la asimilación de la mayoría de nuestra población por la cultura española y globalizante, la especializada novedosa emigración a Europa y la llegada de importantes contingentes de población europea y española están modificando nuestra mentalidad sin lugar a dudas. Con todo, Manuel Alemán no sólo nos dejó de herencia una importante obra teórica, sino un ejemplo práctico de producción intelectual, de pensar y reflexionar Canarias desde nuestra propia perspectiva. Nos señaló una veredita apenas transitada aún por nuestro pueblo; la de pensar por nosotros mismos que somos y que queremos ser.
Blog NACIÓN CANARIA
Enlaces relacionados:
http://nacioncanaria.blogspot.com/2008/06/manuel-alemn-un-intelectual-del-pueblo.html
http://www.manuel-aleman.org/
Psicología del hombre canario fue sin duda la obra cumbre de Manuel Alemán marcando un antes y un después en la toma de conciencia nacional de nuestro pueblo. El pensamiento del autor está claramente influenciado por la Teología de la Liberación y la figura del sacerdote suramericano Camilo Torres, y en su obra cita a teóricos del anticolonialismo como Albert Memmi. Fue publicado en 1980 y fue pionero –y sigue siéndolo- en el método riguroso y dialéctico de explicar la historia y psicología del isleño. A pesar de haber coincidido su publicación en una época de auge del despertar de la conciencia nacional y del Movimiento de liberación nacional, su influencia en el discurso y toma de conciencia colectiva fue, en nuestra opinión, muy relativa. Algo que contrasta con la calidad de la obra y su gran perspectiva innovadora.
Psicología del hombre canario abarca temas como la percepción de la consciencia de canariedad por el isleño y sus distintos niveles, sin olvidar los factores objetivos. La canariedad objetivamente es el resultado de factores objetivos: la geografía, historia, raza, cultura y lengua. Nuestra ubicación en el mundo y la realidad africana y archipielágica, la historia peculiar, el mestizaje específico que ha forjado una cultura concreta y una modalidad lingüística dialectal del castellano única en el mundo. Por otro lado los factores psicológicos y subjetivos divididos en diversos niveles (inconsciente, preconsciente y consciente). La influencia del paisaje y la historia en nuestra mentalidad también son analizadas.
Tras este tanteo general, Alemán pega a profundizar en cuestiones más concretas que afectan a nuestra manera de pensar como la rivalidad infantil entre pueblos e islas, la disfunción de la conciencia o el mimetismo entre otros. “Es una rivalidad infantil, atacando con nombretes y apodos, provocando contiendas ingenuas entre pueblos y entre islas, planteando litigios sobre datos del paisaje, -mi pueblo o isla es más bonito- sobre la modalidad de la voz –unos pueblos ridiculizan a otros su forma de expresarse-. Esta rivalidad es una consecuencia de la inseguridad básica, de la inestabilidad psicológica y sociológica del canario. (…) Es síntoma de la agresividad desplazada del canario: la falta de localización de la causa verdadera de la expoliación de nuestra gente hasta ser indigentes de todo, le lleva a canalizar su agresividad hacia otras realidades inocentes. Es una rivalidad que agudiza los sentimientos localistas del pequeño pueblo, con la consecuente pérdida de conciencia de región. Ha sido una rivalidad manipulada por los dirigentes del Archipiélago.” Al respecto de la Disfunción de la conciencia explica que “El sistema sociocultural canario feudalista, mercantilista, capitalista, ha atenazado al hombre isleño en estratos tan profundos de la psique, como es la conciencia. Esto hace que el explotado se identifique con su explotador, justificándolo, racionalizándolo. El Mimetismo es una postura imitativa de las formas exteriores. “El mimetismo es, por tanto, un mecanismo de defensa promovido desde la lucha por la existencia, desde la necesidad de sobrevivir”. “Todos los pueblos dominados han sufrido este fenómeno de “infancia psicológica”, convirtiéndose en pueblos imitadores para así, en la seguridad del “padre”, paliar la incertidumbre de su inconsistencia. Y este es el caso de Canarias. Parece como si el temor al padre”, en nuestro caso Castilla-Europa, le impulsara a imitarlo para así evitar su enfado y su amenaza.”
Finalmente el autor esboza una propuesta para encarar el futuro de Canarias donde asigna un papel primordial a la concienciación y la conquista de la cultura negada del país. Quizás esta sea de las más notables exposiciones teóricas de la regeneración psicológica de nuestro pueblo mediante la cultura y la identidad.
Psicología del hombre canario es una auténtica ofrenda de Manuel Alemán a su pueblo. Una herramienta teórica básica para abordar nuestra conciencia y transformarla. Paso prioritario –antes que los votos y las siglas- que constituye sin duda alguna los cimientos de el país que queremos construir. Aunque esta impagable obra esté de rabiosa actualidad casi treinta años después, no vamos a negar que los tiempos han cambiado vertiginosamente, y seguramente nuevos factores están ya afectando a nuestra psicología colectiva como pueblo. La terciarización extrema del modelo económico, el desarraigo urbano y la asimilación de la mayoría de nuestra población por la cultura española y globalizante, la especializada novedosa emigración a Europa y la llegada de importantes contingentes de población europea y española están modificando nuestra mentalidad sin lugar a dudas. Con todo, Manuel Alemán no sólo nos dejó de herencia una importante obra teórica, sino un ejemplo práctico de producción intelectual, de pensar y reflexionar Canarias desde nuestra propia perspectiva. Nos señaló una veredita apenas transitada aún por nuestro pueblo; la de pensar por nosotros mismos que somos y que queremos ser.
Blog NACIÓN CANARIA
Enlaces relacionados:
http://nacioncanaria.blogspot.com/2008/06/manuel-alemn-un-intelectual-del-pueblo.html
http://www.manuel-aleman.org/
jueves, 14 de mayo de 2009
miércoles, 13 de mayo de 2009
Crimen y Castigo
«¿Qué haréis en una sociedad anarquista con criminales, paranoicos, violadores y asesinos en serie?»
Esta es la pregunta que con frecuencia se realiza, cuando en alguna discusión manifestamos que los anarquistas queremos eliminar cárceles y cuerpos de policía en la futura sociedad libertaria.
Normalmente el anarquista responde que el tipo de delito de esta sociedad, es la consecuencia de una serie de causas: si hay dinero y desigualdad en su reparto, habrá quien lo robe. Por el contrario, si desaparece el dinero y la posibilidad de acumular riqueza, dejará de existir el robo. Es decir: si eliminas la causa, desaparecerá el efecto. En una sociedad anarquista, en una sociedad libre, sin dominación e igualitaria, multitud de delitos desaparecerán.
A pesar de ello, objetan, seguirá habiendo crímenes, ya que determinadas conductas sociopáticas no dependen del ambiente, ya sea la sociedad más libre que se pueda imaginar. Hay conductas que vienen inscritas —de alguna manera—, en la propia personalidad. Hay individuos que disfrutan matando, vejando, humillando sexualmente. Hay personas que llevan en la sangre el asesinato, que se ven compulsivamente impelidas a realizarlo... Y vuelven a preguntar: «cómo neutralizaríais a esos sociópatas?, ¿qué haríais con ellos?».
Lo que vienen a decir, es que hace falta un cuerpo policíaco eficaz que investigue esos casos escabrosos, y una institución que reinserte socialmente a los delincuentes.
A esto respondemos lo siguiente: que en la actualidad la policía no es eficaz para erradicar el delito; que la cárcel no sirve para la función de reinserción social; que de la ley no emana la justicia.
A) La policía no es eficaz para erradicar el delito. La creencia en su eficacia es debida —en gran medida—, al autobombo y a la propaganda.
— En la sociedad se producen un número de delitos muy superior al de los que son conocidos por la policía, ya que la mayoría de los pequeños delitos no son denunciados. De los delitos conocidos mediante denuncia, muchos no son investigados y se archivan. De los que son investigados, tan solo el 30% —según estadística del Ministerio del Interior—, son resueltos. De los que son resueltos habría que descontar los que son mal resueltos culpabilizando a inocentes con buena o mala fe, o los que se dan por resueltos sin haberlo sido...
— El Ministerio del Interior suele además falsear las estadísticas para que aparezcan menos delitos de los realmente conocidos. Así hay una gran diferencia entre los 1.294 homicidios declarados por el Ministerio del Interior en el 2002, y las 2.289 muertes investigadas por la Fiscalía General del Estado.
http://www.el-mundo.es/cronica/2004/436/1077544537.html
— Si combatir el delito es el objetivo de la policía, se la debería ver en los barrios marginales, controlando los puntos de venta de droga, el tráfico de armas, los vehículos robados... Sin embargo, en estos barrios no sólo no hay comisaría, sino que es muy raro que entren en ellos unidades policiales, dada la hostilidad con que son recibidas.
— Por el contrario la policía a quien se dedica a controlar concienzudamente, es a ciudadanos “normales”. Quien está correctamente identificado, trabaja, posee domicilio, no va armado, carece de instintos agresivos..., es más fácilmente controlable. La policía no sirve tanto para reprimir al delincuente, como para evitar que la gente de «ley y orden» se atreva a delinquir. Piénsese en la cantidad de medios «antidisturbios» que posee la policía.
— En consecuencia lo que pretende la policía no es erradicar la delincuencia, sino mantenerla dentro de unos límites. Es decir, que exista un ghetto sirve —según este razonamiento—: primero para justificar el gasto en un apartato represivo; segundo, para que el ciudadano honrado se sienta defendido. De esta manera la víctima acaba pagando a su propio verdugo. No decimos que esto sea consciente —ni mucho menos—, sino que funciona de esa manera.
— La policía sólo podría ser eficaz cuando hubiese pocos delitos. En una sociedad como la nuestra, en la que se cometen delitos continuamente, sólo es eficaz en aquellos casos especialmente relevantes a los que «miran» o que «interesan» (infiltraron la ETA, pero no se preocuparon de los islamistas que correteaban ante sus mismas narices).
— Hay muchos delitos, porque las circunstancias de esta sociedad favorecen que los haya. Al existir un régimen que defiende la propiedad privada, la desigualdad y el privilegio, de los más de dos millones de delitos «conocidos» que se producen anualmente en España, el 80% son «contra la propiedad». Este número ingente de delitos, convierte en ineficaz cualquier actividad policial.
— La policía no sólo es ineficaz para eliminar el delito, sino que más a menudo de lo que parece, lo impulsa y estimula. La trama de confidentes tolerados que traficaban con armas, explosivos y drogas, aparecida en torno al 11-M pueden servir de ejemplo.
— Hay que mencionar, además, los propios delitos que realiza la policía en el ejercicio de sus funciones: desde negligencias hasta abusos, cohechos, torturas, asesinatos...
B) La cárcel no puede reinsertar al delincuente.
La función de la cárcel no es la de reinsertar al delincuente en la sociedad de la que se ha salido. Es absurdo que se pretenda socializar a alguien, sacándolo de esa sociedad, desarraigándolo, aislándolo tras unos muros, hacinándolo con miles como él, y haciéndole pasar una serie de humillaciones que quitan la dignidad y la libertad de las personas. Un régimen de esclavitud sólo puede generar su propia perpetuación y la sumisión o la reacción violenta de quienes lo soportan. Por eso la cárcel es un antro en el que los abusos, la violación de los derechos humanos, los asesinatos..., son tapados con hermosas palabras como reinserción. La función de la cárcel es la que siempre ha tenido: la ejecución en el último tramo del circuito represivo, de la venganza y el castigo de aquellos grupos que son privilegiados por las leyes. Esta venganza se efectúa sobre un preso, del que se espera su sometimiento, o en caso de no conseguirse, su aniquilamiento.
C) La ley no puede proporcionar la justicia. Porque las leyes lo que hacen es asentar privilegios e injusticias. Vivimos en una sociedad desigual, en la que unos son pobres y otros ricos. Dado que las leyes se dedican a la defensa de la propiedad privada y los derechos de los individuos, lo que hace la ley es refrendar la desigualdad. Al definir como delito que el que no tiene tome aquello que posee el que tiene, lo que hace es condenar a la cárcel a los desposeídos.
A pesar de todos los argumentos de los clásicos y de los modernos que ofrecemos en contra de las cárceles, policías y leyes, los detractores del anarquismo insisten en que en una sociedad anarquista, aún existiendo pocos delitos, siempre se tendrán que perseguir los de los individuos claramente enfermos o simples criminales, que atenten contra la vida y la integridad de las comunidades y de las personas, y que para ello seguirá siendo inevitable la creación de cárceles y cuerpos de seguridad.
Imaginemos pues, que en una comunidad anarquista aparecen una serie de muertes misteriosas (pongamos un centenar), cometidas por un asesino invisible, letal, silencioso, que no deja huella a su paso. ¿Quién se ocuparía de descubrirlo?
La respuesta es que lo descubriría el servicio de salud pública, a través de su equipo de vigilancia epidemiológica, siguiendo los métodos de la ciencia médica. Así se determinan los agentes causales de distintos envenenamientos masivos, poniendo nombre y apellido al veneno y señalando al responsable: la talidomida, el mercurio, el vibrión colérico, los aceites industriales. No se llama a la policía para descubrir una secuencia de cien fallecimientos y miles de lesionados. No se espera a decenas de tipos vestidos de azul y armados con porras. Se avisa a los epidemiólogos, a biólogos, a técnicos, a científicos, hombres y mujeres vestidos de calle o con bata blanca, que preguntan, observan, analizan, descubren y toman medidas. Quien es capaz de encontrar un virus, puede descubrir cualquier asesino, sea humano o venido de ultratumba. Y son esos técnicos, que no ostentan la capacidad represiva de un policía, quienes pueden aislar, controlar y reducir esas posibles amenazas, mediante la ayuda —si es preciso—, de otros profesionales que intervienen en situaciones de catástrofe: bomberos, protección civil.
No hace falta —por lo tanto—, un cuerpo dotado de funciones represivas, que se beneficie del delito para justificar su existencia.
AlasBarricadas.org
Esta es la pregunta que con frecuencia se realiza, cuando en alguna discusión manifestamos que los anarquistas queremos eliminar cárceles y cuerpos de policía en la futura sociedad libertaria.
Normalmente el anarquista responde que el tipo de delito de esta sociedad, es la consecuencia de una serie de causas: si hay dinero y desigualdad en su reparto, habrá quien lo robe. Por el contrario, si desaparece el dinero y la posibilidad de acumular riqueza, dejará de existir el robo. Es decir: si eliminas la causa, desaparecerá el efecto. En una sociedad anarquista, en una sociedad libre, sin dominación e igualitaria, multitud de delitos desaparecerán.
A pesar de ello, objetan, seguirá habiendo crímenes, ya que determinadas conductas sociopáticas no dependen del ambiente, ya sea la sociedad más libre que se pueda imaginar. Hay conductas que vienen inscritas —de alguna manera—, en la propia personalidad. Hay individuos que disfrutan matando, vejando, humillando sexualmente. Hay personas que llevan en la sangre el asesinato, que se ven compulsivamente impelidas a realizarlo... Y vuelven a preguntar: «cómo neutralizaríais a esos sociópatas?, ¿qué haríais con ellos?».
Lo que vienen a decir, es que hace falta un cuerpo policíaco eficaz que investigue esos casos escabrosos, y una institución que reinserte socialmente a los delincuentes.
A esto respondemos lo siguiente: que en la actualidad la policía no es eficaz para erradicar el delito; que la cárcel no sirve para la función de reinserción social; que de la ley no emana la justicia.
A) La policía no es eficaz para erradicar el delito. La creencia en su eficacia es debida —en gran medida—, al autobombo y a la propaganda.
— En la sociedad se producen un número de delitos muy superior al de los que son conocidos por la policía, ya que la mayoría de los pequeños delitos no son denunciados. De los delitos conocidos mediante denuncia, muchos no son investigados y se archivan. De los que son investigados, tan solo el 30% —según estadística del Ministerio del Interior—, son resueltos. De los que son resueltos habría que descontar los que son mal resueltos culpabilizando a inocentes con buena o mala fe, o los que se dan por resueltos sin haberlo sido...
— El Ministerio del Interior suele además falsear las estadísticas para que aparezcan menos delitos de los realmente conocidos. Así hay una gran diferencia entre los 1.294 homicidios declarados por el Ministerio del Interior en el 2002, y las 2.289 muertes investigadas por la Fiscalía General del Estado.
http://www.el-mundo.es/cronica/2004/436/1077544537.html
— Si combatir el delito es el objetivo de la policía, se la debería ver en los barrios marginales, controlando los puntos de venta de droga, el tráfico de armas, los vehículos robados... Sin embargo, en estos barrios no sólo no hay comisaría, sino que es muy raro que entren en ellos unidades policiales, dada la hostilidad con que son recibidas.
— Por el contrario la policía a quien se dedica a controlar concienzudamente, es a ciudadanos “normales”. Quien está correctamente identificado, trabaja, posee domicilio, no va armado, carece de instintos agresivos..., es más fácilmente controlable. La policía no sirve tanto para reprimir al delincuente, como para evitar que la gente de «ley y orden» se atreva a delinquir. Piénsese en la cantidad de medios «antidisturbios» que posee la policía.
— En consecuencia lo que pretende la policía no es erradicar la delincuencia, sino mantenerla dentro de unos límites. Es decir, que exista un ghetto sirve —según este razonamiento—: primero para justificar el gasto en un apartato represivo; segundo, para que el ciudadano honrado se sienta defendido. De esta manera la víctima acaba pagando a su propio verdugo. No decimos que esto sea consciente —ni mucho menos—, sino que funciona de esa manera.
— La policía sólo podría ser eficaz cuando hubiese pocos delitos. En una sociedad como la nuestra, en la que se cometen delitos continuamente, sólo es eficaz en aquellos casos especialmente relevantes a los que «miran» o que «interesan» (infiltraron la ETA, pero no se preocuparon de los islamistas que correteaban ante sus mismas narices).
— Hay muchos delitos, porque las circunstancias de esta sociedad favorecen que los haya. Al existir un régimen que defiende la propiedad privada, la desigualdad y el privilegio, de los más de dos millones de delitos «conocidos» que se producen anualmente en España, el 80% son «contra la propiedad». Este número ingente de delitos, convierte en ineficaz cualquier actividad policial.
— La policía no sólo es ineficaz para eliminar el delito, sino que más a menudo de lo que parece, lo impulsa y estimula. La trama de confidentes tolerados que traficaban con armas, explosivos y drogas, aparecida en torno al 11-M pueden servir de ejemplo.
— Hay que mencionar, además, los propios delitos que realiza la policía en el ejercicio de sus funciones: desde negligencias hasta abusos, cohechos, torturas, asesinatos...
B) La cárcel no puede reinsertar al delincuente.
La función de la cárcel no es la de reinsertar al delincuente en la sociedad de la que se ha salido. Es absurdo que se pretenda socializar a alguien, sacándolo de esa sociedad, desarraigándolo, aislándolo tras unos muros, hacinándolo con miles como él, y haciéndole pasar una serie de humillaciones que quitan la dignidad y la libertad de las personas. Un régimen de esclavitud sólo puede generar su propia perpetuación y la sumisión o la reacción violenta de quienes lo soportan. Por eso la cárcel es un antro en el que los abusos, la violación de los derechos humanos, los asesinatos..., son tapados con hermosas palabras como reinserción. La función de la cárcel es la que siempre ha tenido: la ejecución en el último tramo del circuito represivo, de la venganza y el castigo de aquellos grupos que son privilegiados por las leyes. Esta venganza se efectúa sobre un preso, del que se espera su sometimiento, o en caso de no conseguirse, su aniquilamiento.
C) La ley no puede proporcionar la justicia. Porque las leyes lo que hacen es asentar privilegios e injusticias. Vivimos en una sociedad desigual, en la que unos son pobres y otros ricos. Dado que las leyes se dedican a la defensa de la propiedad privada y los derechos de los individuos, lo que hace la ley es refrendar la desigualdad. Al definir como delito que el que no tiene tome aquello que posee el que tiene, lo que hace es condenar a la cárcel a los desposeídos.
A pesar de todos los argumentos de los clásicos y de los modernos que ofrecemos en contra de las cárceles, policías y leyes, los detractores del anarquismo insisten en que en una sociedad anarquista, aún existiendo pocos delitos, siempre se tendrán que perseguir los de los individuos claramente enfermos o simples criminales, que atenten contra la vida y la integridad de las comunidades y de las personas, y que para ello seguirá siendo inevitable la creación de cárceles y cuerpos de seguridad.
Imaginemos pues, que en una comunidad anarquista aparecen una serie de muertes misteriosas (pongamos un centenar), cometidas por un asesino invisible, letal, silencioso, que no deja huella a su paso. ¿Quién se ocuparía de descubrirlo?
La respuesta es que lo descubriría el servicio de salud pública, a través de su equipo de vigilancia epidemiológica, siguiendo los métodos de la ciencia médica. Así se determinan los agentes causales de distintos envenenamientos masivos, poniendo nombre y apellido al veneno y señalando al responsable: la talidomida, el mercurio, el vibrión colérico, los aceites industriales. No se llama a la policía para descubrir una secuencia de cien fallecimientos y miles de lesionados. No se espera a decenas de tipos vestidos de azul y armados con porras. Se avisa a los epidemiólogos, a biólogos, a técnicos, a científicos, hombres y mujeres vestidos de calle o con bata blanca, que preguntan, observan, analizan, descubren y toman medidas. Quien es capaz de encontrar un virus, puede descubrir cualquier asesino, sea humano o venido de ultratumba. Y son esos técnicos, que no ostentan la capacidad represiva de un policía, quienes pueden aislar, controlar y reducir esas posibles amenazas, mediante la ayuda —si es preciso—, de otros profesionales que intervienen en situaciones de catástrofe: bomberos, protección civil.
No hace falta —por lo tanto—, un cuerpo dotado de funciones represivas, que se beneficie del delito para justificar su existencia.
AlasBarricadas.org
lunes, 11 de mayo de 2009
martes, 5 de mayo de 2009
No al Parlamento europeo
Los canarios y las canarias no debemos participar en las próximas elecciones al Parlamento Europeo por múltiples razones. La primera es que no somos europeos, sino habitantes de una colonia africana de un país europeo. En dicho Parlamento participan 785 delegados de los 27 estados europeos, donde dominan los antiguos países colonialistas, Inglaterra, Alemania, Holanda, Italia, Bélgica y los actuales, Francia y España, aún con colonias en América, Asia y África. El actual Parlamento está formado por 14 gobiernos de centro-derecha, 8 de izquierda indefinida y 5 de grandes coaliciones y ninguno de un partido anticolonial. El actual Parlamento, y casi seguro el próximo, estará dominado por el centro-derecha, aunque hay un centro izquierda que no se define en las cuestiones coloniales, que es lo que podría interesar a Canarias para influenciar a través de los medios de información sobre nuestras aspiraciones soberanistas a favor de la independencia.
Como ya se sabe, si hay algunos canarios enchufados en los partidos españoles que participarán en las próximas elecciones europeas del 7 de junio, sólo van a cantar la canción que le preparen en Madrid los partidos monárquicos que apoyan a la metrópoli española. Don Fernando Guanarteme López de Aguilar, conde duque de San Borondón y marqués del Muni, ex equo, aunque nacido en Canarias, candidato del partido monárquico PSOE, no va a denunciar el colonialismo español ni a la monarquía española que coloniza estas tierras africanas. Tampoco lo harán otros canarios socialistas, como ya ha habido en Bruselas estos pasados años, que han sido más españoles que los propios españoles, como aquel guanarteme de Las Palmas que vino con sus seguidores españolizados a combatir al gran mencey, Imoha Quebehi Benkhomo en la isla de Tenerife, donde se había derrotado en la batalla de Acentejo al pirata filibustero Fernández de Lugo y sus huestes en 1494.
De los canarios que a lo mejor se enchufan en el PP podemos decir otro tanto, así como de los que militan en otros partidos españoles, que sólo están para aplaudir y cobrar sus sueldos en Bruselas. Ahora bien, creemos que eso que hace Coalición Canaria de presentar a una militante canaria de Fuerteventura, Claudina Morales, en un batiburrillo de lista de partidos nacionalistas españoles donde se mezclan autonomistas catalanes, vascos y de otros lugares de España, es un brindis al sol o querer buscar protagonismo barato cuando se sabe que ninguno va a salir y si sale un catalán de CIU no va a condenar el colonialismo español en África sino a defender los intereses económicos catalanes o vascos en Europa todo lo más. Además, Canarias nunca podrá intervenir una sola vez, porque es un territorio ultraperiférico, es decir una colonia europea en otro continente y no representa un territorio europeo sin patria como Catalunya o Euskalerría, que en el futuro podrán representar dichas naciones y que controla la Corona española.
De todas maneras, ningún patriota canario consciente irá a votar en estas elecciones europeas, sino que habrá, como otras veces, una gran abstención donde sólo votarán los europeos instalados en Canarias y los canarios españolizados que obedecen los dictados de los partidos españoles que sostienen la monarquía colonial. Si Coalición Canaria hubiera querido hacer algo práctico por esta tierra sometida al colonialismo español, lo que debería haber hecho es no participar en estas elecciones europeas, porque un partido político de Canarias no representará nunca a ningún país europeo y nunca lo dejarán hablar en dicho Parlamento. Es como si ahora hubiera representantes de países coloniales o ultraperiféricos como la Guayana francesa, las islas americanas de Guadalupe o Martinica, la asiática de la Nueva Caledonia o la isla africana de La Reunión, vestidos con sus trajes típicos y diciéndose europeos, como Ana Oramas en el Parlamento español. Sería más serio crear una Oficina Diplomática Canaria en Bruselas, con patriotas conscientes, para informar a los parlamentarios europeos de que España continúa dispuesta a colonizar un archipiélago africano, Canarias, desde hace seis siglos, y que nuestro pueblo quiere arrancar la independencia que por derecho nos pertenece. Esa oficina diplomática canaria informaría a los parlamentarios europeos de lo que piensa el pueblo canario expresado en editoriales de periódicos como el independiente EL DÍA, y denunciaría a la prensa española publicada en Canarias a la órdenes de Madrid, así como radios al servicio del colonialismo dirigidas por agentes españoles que funcionan en esta colonia. Esta oficina diplomática podría difundir el Anteproyecto de Constitución de la República Federal Canaria traducido en diferentes idiomas y otros comunicados y de esta manera preparar e ir haciendo por el futuro de nuestra nación.
Si la representante de CC no quiere hacer el ridículo y quedar señalada para siempre en nuestra historia, como los actuales diputados canarios que se reunieron un nefasto día en el Parlamento autónomo canario para condenar el derecho a la libre expresión y condenar a un periódico independiente, debería retirarse cuanto antes de las listas del Parlamento Europeo y pedir a todos los canarios que se abstengan de votar en las elecciones extranjeras del 7 de junio próximo, pues a nosotros lo que nos interesa es lo que se va a decidir antes de finales del 2010, última década fijada por las Naciones Unidas para descolonizar los territorios coloniales.
Antonio Cubillo Ferreira
Presidente del partido independentista Congreso Nacional de Canarias (CNC), brazo político del Movimiento de Liberación Nacional, el MPAIAC.
Como ya se sabe, si hay algunos canarios enchufados en los partidos españoles que participarán en las próximas elecciones europeas del 7 de junio, sólo van a cantar la canción que le preparen en Madrid los partidos monárquicos que apoyan a la metrópoli española. Don Fernando Guanarteme López de Aguilar, conde duque de San Borondón y marqués del Muni, ex equo, aunque nacido en Canarias, candidato del partido monárquico PSOE, no va a denunciar el colonialismo español ni a la monarquía española que coloniza estas tierras africanas. Tampoco lo harán otros canarios socialistas, como ya ha habido en Bruselas estos pasados años, que han sido más españoles que los propios españoles, como aquel guanarteme de Las Palmas que vino con sus seguidores españolizados a combatir al gran mencey, Imoha Quebehi Benkhomo en la isla de Tenerife, donde se había derrotado en la batalla de Acentejo al pirata filibustero Fernández de Lugo y sus huestes en 1494.
De los canarios que a lo mejor se enchufan en el PP podemos decir otro tanto, así como de los que militan en otros partidos españoles, que sólo están para aplaudir y cobrar sus sueldos en Bruselas. Ahora bien, creemos que eso que hace Coalición Canaria de presentar a una militante canaria de Fuerteventura, Claudina Morales, en un batiburrillo de lista de partidos nacionalistas españoles donde se mezclan autonomistas catalanes, vascos y de otros lugares de España, es un brindis al sol o querer buscar protagonismo barato cuando se sabe que ninguno va a salir y si sale un catalán de CIU no va a condenar el colonialismo español en África sino a defender los intereses económicos catalanes o vascos en Europa todo lo más. Además, Canarias nunca podrá intervenir una sola vez, porque es un territorio ultraperiférico, es decir una colonia europea en otro continente y no representa un territorio europeo sin patria como Catalunya o Euskalerría, que en el futuro podrán representar dichas naciones y que controla la Corona española.
De todas maneras, ningún patriota canario consciente irá a votar en estas elecciones europeas, sino que habrá, como otras veces, una gran abstención donde sólo votarán los europeos instalados en Canarias y los canarios españolizados que obedecen los dictados de los partidos españoles que sostienen la monarquía colonial. Si Coalición Canaria hubiera querido hacer algo práctico por esta tierra sometida al colonialismo español, lo que debería haber hecho es no participar en estas elecciones europeas, porque un partido político de Canarias no representará nunca a ningún país europeo y nunca lo dejarán hablar en dicho Parlamento. Es como si ahora hubiera representantes de países coloniales o ultraperiféricos como la Guayana francesa, las islas americanas de Guadalupe o Martinica, la asiática de la Nueva Caledonia o la isla africana de La Reunión, vestidos con sus trajes típicos y diciéndose europeos, como Ana Oramas en el Parlamento español. Sería más serio crear una Oficina Diplomática Canaria en Bruselas, con patriotas conscientes, para informar a los parlamentarios europeos de que España continúa dispuesta a colonizar un archipiélago africano, Canarias, desde hace seis siglos, y que nuestro pueblo quiere arrancar la independencia que por derecho nos pertenece. Esa oficina diplomática canaria informaría a los parlamentarios europeos de lo que piensa el pueblo canario expresado en editoriales de periódicos como el independiente EL DÍA, y denunciaría a la prensa española publicada en Canarias a la órdenes de Madrid, así como radios al servicio del colonialismo dirigidas por agentes españoles que funcionan en esta colonia. Esta oficina diplomática podría difundir el Anteproyecto de Constitución de la República Federal Canaria traducido en diferentes idiomas y otros comunicados y de esta manera preparar e ir haciendo por el futuro de nuestra nación.
Si la representante de CC no quiere hacer el ridículo y quedar señalada para siempre en nuestra historia, como los actuales diputados canarios que se reunieron un nefasto día en el Parlamento autónomo canario para condenar el derecho a la libre expresión y condenar a un periódico independiente, debería retirarse cuanto antes de las listas del Parlamento Europeo y pedir a todos los canarios que se abstengan de votar en las elecciones extranjeras del 7 de junio próximo, pues a nosotros lo que nos interesa es lo que se va a decidir antes de finales del 2010, última década fijada por las Naciones Unidas para descolonizar los territorios coloniales.
Antonio Cubillo Ferreira
Presidente del partido independentista Congreso Nacional de Canarias (CNC), brazo político del Movimiento de Liberación Nacional, el MPAIAC.
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